Tras advertir que las fronteras extensas con que cuenta Colombia son “sumamente porosas”, situación que aprovechan las redes criminales para introducir contrabando, el director de la Policía Fiscal y Aduanera, Polfa, general Gustavo Moreno, dijo que se están fortaleciendo los controles para así evitar que los departamentos pierdan al año no menos de un billón de pesos.
“El contrabando puede ingresar por muchas partes, porque los delincuentes hoy en día mutan e idean diferentes mecanismos e instrumentos en un esfuerzo para burlar la acción de las autoridades”, precisó el oficial.
El general Moreno señaló que “Colombia es un país privilegiado por su posición geográfica, posee dos mares, con puertos, aeropuertos y con fronteras extensas y sumamente ‘porosas’, situación que es aprovechada por las redes criminales para introducir ilegalmente al país cigarrillos, licores, electrodomésticos, entre otras mercancías de contrabando”.
El general Moreno afirmó que además de los cigarrillos y licores que afectan a la economía nacional, también se registra el ingreso ilegal de textiles, de calzado, de hidrocarburos y de arroz, entre otros productos.
Pero dijo que ya cuenta con un nuevo refuerzo de uniformados para fortalecer los controles en las zonas de frontera y en los terminales terrestres, marítimos y aéreos, en un esfuerzo para neutralizar la acción de los contrabandistas.
Agregó que en estos momentos se trabaja con el gobierno de Venezuela en un esfuerzo para neutralizar el contrabando y desde ya “estamos trabajando en cinco grandes objetivos que delinquen en la zona de frontera”.
Y es que según un estudio, la venta de cigarrillos de contrabando deja pérdidas anualmente de $200 mil millones en los 32 departamentos del país.
Y si se suma el contrabando de cervezas y licores, las pérdidas superan el billón de pesos, reveló el director del Programa Anticontrabando de la Federación de Departamentos, Felipe Córdoba.
En tiendas de barrio, en las licorerías, en restaurantes y discotecas, en minoristas, en grandes almacenes y otros lugares aparecen los cigarrillos ilegales procedentes en su gran mayoría de China y de Paraguay.
Córdoba afirmó que “el valor en la calle de los cigarrillos ilegales es un indicador de dónde vienen y para dónde van estos recursos, pues su precio de venta está por debajo del costo de producción y transporte y eso solo se explica si el propósito es convertirlo en pesos como herramienta de lavado de dinero”.
Explicó que el consumo de cigarrillos de contrabando en el país pasó del 16% en el 2011 al 19% en el 2013.
Narró que este fenómeno obedece, al parecer, por la acción de una delincuencia organizada cada vez más sofisticada que introduce cigarrillo ilegal de China y de Paraguay, que lo vende a muy bajo precio, por debajo de los costos de producción y de transporte.
Pedro Cedeño, propietario de una tienda en Arborizadora Baja, en Ciudad Bolívar, afirma que semanalmente aparece un distribuidor que surte no solo su negocio sino los del sector con cigarrillos de diferentes marcas a precios muy cómodos.
Explicó que los cigarrillos de contrabando cuestan menos de la mitad de los legales: el precio del cigarrillo ilegal es de $1.300 en promedio nacional, mientras que el legal se vende en promedio a $3.000.
Para Felipe Córdoba “ante este panorama, los 32 gobernadores del territorio nacional, prendieron las alarmas sobre la amenaza que este aumento significa para sus finanzas, pujes, de acuerdo con el director ejecutivo de la Federación Nacional de Departamentos, Germán Chica, los departamentos dejan de percibir anualmente 200 mil millones de pesos por cuenta del contrabando de cigarrillos”.
“El estudio consigna las zonas donde ha crecido este fenómeno del contrabando. En la región Caribe, casi la mitad de los cigarrillos consumidos son ilegales, 46%, en tanto que en la región Pacífica pasó de tener un consumo de cigarrillos de contrabando de 10% en 2011 al 19% en el 2013”, acotó.
Reveló igualmente que gracias al trabajo de los departamentos y de la Policía Fiscal y Aduanera, Polfa, el consumo de cigarrillos ilegales en el eje cafetero registra una significativa disminución, pues pasó del 17, en el 2011 al 14%, a diciembre 31 de 2013.
Dijo Córdoba que “es necesario reconocer que en los departamentos de Caldas, Quindío, Risaralda y en Antioquia, se fortaleció la lucha contra este flagelo, lo que permite obtener grandes resultados en la reducción de la venta y consumo de cigarrillos de contrabando”.
De otro lado, denunció que en el departamento del Valle del Cauca, también se incrementó el consumo de cigarrillo de contrabando por los problemas que se registran en el puerto del Distrito de Buenaventura.
“Ese cigarrillo que se fuma ilegal, que es de contrabando, hace que se esfumen los recursos de la salud de los departamentos. Recordemos que la salud no discrimina la edad, no discrimina el color, el credo, ni estrato, ni mucho menos partido político, por eso todos nosotros vamos a llegar un día a una clínica o a un hospital. Por eso es tan importante que se fumen un cigarrillo, pero legal; que se tomen un licor, que no sea de contrabando, para que esos recursos lleguen a donde deben llegar para hacer las inversiones necesarias en materia de salud”, afirmó.
“El chazero o puesto de venta ambulante es el último eslabón de la cadena de contrabando de cigarrillos y las autoridades no lo persiguen a él, sino a los integrantes de las grandes redes o estructuras criminales que cada vez son más organizaciones sofisticadas que introducen el cigarrillo ilegal por los puertos y zonas de frontera, pues todos los días les están quitando la salud a los colombianos”, expresó.
Las investigaciones
El director del Programa Anticontrabando de la Federación de Departamentos, Felipe Córdoba, reveló que “todo el material probatorio sobre la delincuencia organizada dedicada al contrabando de cigarrillos está en este momento en poder de la Fiscalía que adelanta las correspondientes investigaciones”.
“La Fiscalía viene haciendo un trabajo juicioso y estricto y por esta razón esperamos que tengan resultados a la mayor brevedad”, indicó.
Expresó que gracias al trabajo coordinado entre los departamentos y la Policía Fiscal y Aduanara, Polfa, desde el primero de enero a la fecha se han incrementado en un 167% las aprehensiones en todo el país tanto de cigarrillos como de licores.
“Vemos que se han fortalecido no solo en la costa norte del país, también en el Valle del Cauca y en todo el Pacífico colombiano las aprehensiones en materia de contrabando, de lo que nos está generando este gran flagelo del lavado de activos para las bandas criminales”, dijo.