La estadounidense Missy Franklin ganó ayer la medalla de oro de 200 metros espalda en los Juegos Olímpicos de Londres 2012, estableciendo de paso un nuevo récord del mundo con un registro de 2 minutos, 04 segundos y 06 centésimas.
A sus 17 años, la nueva maravilla de la natación estadounidense superó en la final a la rusa Anastasia Zueva (2:05.92), que se quedó con la plata, y a su compatriota Elisabeth Beisel (2:06.55), medalla de bronce, para hacerse con su tercer título olímpico en estos Juegos.
“No puedo pensar en una mejor manera de terminar mis pruebas individuales”, dijo la joven nadadora.
“Esta es mi favorita, quería salir y divertirme, y eso es lo que hice”, agregó la también vigente campeona mundial de la disciplina. “Soy la chica más feliz del mundo”.
Missy Franklin ya había ganado en Londres los 100 metros espalda y los relevos 4x200 metros libres con sus compañeras del equipo de Estados Unidos.
Franklin sucedió en el palmarés olímpico de los 200 metros espalda a la zimbabuense Kirsty Coventry, que cuatro años después de su triunfo en Pekín se tuvo que conformar con la sexta posición (2:08.18). Coventry era también hasta ahora la plusmarquista mundial con 2:04.81.
La estadounidense respetó el plan que se había marcado y dominó claramente la carrera, sacándole más de un cuerpo a Zueva, la subcampeona del mundo de 2009.
“En los últimos 25 metros lo di todo porque ya no sentía mis brazos o mis piernas”, explicó tras la prueba.
El récord mundial de 200 metros espalda femenino es el séptimo establecido en el Centro Acuático en estos Juegos de Londres 2012.
La joven nadadora estadounidense disputará todavía una prueba hoy, última jornada de la natación, los relevos 4X100 m estilos, tras lo cual podrá celebrar los éxitos cosechados en su debut olímpico.