El nuevo presidente paraguayo, Federico Franco, dijo este sábado en entrevista con AFP que intentará contactar a su destituido antecesor, Fernando Lugo, para que ayude a explicar lo que ocurrió en su país a los vecinos de la región, que se niegan a reconocer su mandato.
"Ahora mismo estoy tratando de hablar con el presidente Lugo, lo voy a hacer, creo que es muy importante su presencia como paraguayo para tratar de dar una imagen internacional, que en estos momentos necesitamos de un gobierno legalmente constituido", dijo Franco en el despacho presidencial.
Lugo fue destituido el viernes por el Congreso tras un juicio político sumarísimo iniciado 24 horas antes.
Hasta el momento, ningún país ha reconocido el nuevo gobierno paraguayo, situación que se agravó en la noche del sábado con el anuncio argentino de retirar su embajador en Asunción.
La presidenta Cristina Kirchner dijo el viernes que en Paraguay tuvo lugar un "golpe de Estado".
Franco dijo que planea "pedirle al presidente Lugo que nos ayude a evitar que Paraguay reciba un castigo absolutamente injusto, innecesario e impopular".
El mandatario reiteró además que probablemente no concurrirá a la cumbre del Mercosur (bloque formado por Argentina, Brasil, Paraguay y Uruguay) que tendrá lugar la próxima semana en Argentina.
No "tenemos clara la posición del Mercosur, y si mi presencia va a entorpecer, o desmejorar las relaciones entonces no tiene sentido" ir, dijo.
"Vamos a esperar, ver qué ocurre en los próximos días, vamos a tomar el pulso y de acuerdo a eso vamos a decidir, pero creo que lo más importante es reorganizar el país, es muy reciente todo y no es muy prudente salir del país en este momento", señaló.
"Ojalá que los gobiernos de los países vecinos, Argentina, Brasil y Uruguay entiendan la situación de Paraguay", finalizó Franco.
CIDH rechaza destitución
La Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) afirmó este sábado que el juicio político sumario del Congreso paraguayo que destituyó al presidente Fernando Lugo afectó el Estado de Derecho en ese país.
Es "inaceptable lo expedito del juicio político contra el presidente constitucional y democráticamente electo", señaló en un comunicado la Comisión, ente autónomo de la Organización de Estados Americanos (OEA), al destacar que el procedimiento "afecta la vigencia del Estado de Derecho en Paraguay".
"Es una parodia de la justicia y un atropello al Estado de Derecho remover a un presidente en 24 horas, sin garantías para defenderse", estimó a la prensa en Washington el secretario ejecutivo de la CIDH, Santiago Canton.
Lugo fue destituido el viernes en un juicio político sumarísimo, acusado por la cámara de diputados de "mal desempeño de sus funciones" tras una matanza en una zona rural del país, y fue sustituido por el vicepresidente Federico Franco.
El nuevo gobierno paraguayo de Franco seguía este sábado sin recibir ninguna muestra de apoyo de los países latinoamericanos, sino más bien críticas por la forma con la que se destituyó a Lugo y abiertas acusaciones de golpismo de algunos países.
"Es altamente cuestionable" que un juicio imparcial pueda ser tan breve, reiteró la CIDH.
AFP