El papa argentino Francisco celebró su primera misa en español en la capilla de la Casa Santa Marta en el Vaticano, un gesto que, según confesó, le "ha hecho mucho bien".
Desde su elección como pontífice el pasado 13 de marzo, el papa argentino celebra una misa matutina en italiano en general en la capilla de la residencia donde se aloja, durante la cual habla con su estilo sencillo y claro de los problemas de la gente común.
"Era desde el 26 de febrero que no celebraba misa en español. Y me ha hecho mucho bien", comentó Francisco ante el personal diplomático argentino que trabaja en Italia invitado a la misa.
Durante la homilía, el papa condenó "el mecanismo del insulto", que calificó "una forma de denigración hacia los demás".
"No hace falta ir al psicólogo para saber que cuando uno denigra a otro es porque es él mismo quien no puede crecer y necesita desmerecer a los demás para sentirse alguien", aseguró.