La Comisión Europea emitió sus dudas este lunes sobre los objetivos del gobierno francés en términos de reducción del déficit para 2015 y estimó que su estrategia fiscal es sólo "parcialmente conforme a las exigencias" del pacto de estabilidad.
"De manera general, la estrategia fiscal presentada en el programa es sólo parcialmente conforme a las exigencias del pacto de estabilidad y de crecimiento", indicó en sus recomendaciones macroeconómicas la Comisión, que teme que Francia no cumpla con sus objetivos fiscales en 2015, año en que debe llevar el déficit a 3% del PIB.
La hipótesis de crecimiento "son levemente optimistas para 2015", el gobierno francés pronostica 1,7% mientras que la Comisión prevé 1,5%. Una crítica que que ya recibió Francia a principios de mayo cuando se presentaron las previsiones económicas.
A esto se agrega un recorte de gastos para 2015 "muy ambicioso", que podría comprometer los "objetivos del gobierno".
París presentó un plan de reformas para recortar gastos por 50.000 millones de euros. El punto más importante del programa es un pacto con las empresas para estimular el empleo.
Para respetar la trayectoria de reducción de déficit presentada a la Comisión, el gobierno francés anunció recientemente nuevas medidas, a altura de 4.000 millones de euros para 2014.
Estas medidas fueron celebradas por la Comisión aunque lamentó el insuficiente "nivel de detalle de medidas de saneamiento fiscal".
El año pasado, las recomendaciones fueron objeto de enfrentamiento entre Bruselas y París. El presidente francés, François Hollande, estimó entonces que "la Comisión no debe dictarnos lo que debemos hacer".
Desde que estalló la crisis financiera la Comisión se arrogó nuevas prerrogativas y emite recomendaciones a los Estados miembros para sanear sus economías.
- España: "completar" las reformas -
Con respecto a España la Comisión recomendó que "complete y aplique" las reformas, que refuerce la estrategia presupuestaria desde este año y que especifique las medidas para 2015 y más adelante con el fin de reducir el déficit así como su deuda.
La Comisión recomienda a España que para corregir "de manera duradera" los desequilibrios presupuestarios, aplique "de manera creíble ambiciosas reformas estructurales que permitan incrementar la capacidad de ajuste e impulsar el crecimiento y el empleo".
España "ha avanzado con determinación en el vasto programa" de reformas y de estabilidad para 2013 "así como en las recomendaciones específicas", sostiene la Comisión que destaca las reformas adoptadas como en las pensiones, la asistencia sanitaria, la administración pública, el sector financiero, el mercado laboral, el mercado interior o las tarifas eléctricas, entre otras.
Pero señala no obstante que es "esencial una aplicación plena de las reformas para cosechar los beneficios esperados".
En reglas generales la Comisión Europea preconiza para todo Estado miembro un déficit inferior al 3% del PIB y una deuda pública como máximo de 60% del PIB.
España, cuarta economía de la zona euro, registró un déficit público en 2013 de 7,1% (incluida la carga de la deuda a la banca). En 2012 el déficit de España fue de 10,6% del PIB.
De 2012 a 2013 la deuda pública aumentó del 86% al 93,9% del PIB. Y según las previsiones de la Comisión ésta será de 100,2% en 2014 y 103,8% en 2015.
El programa de estabilidad para España de 2014 prevé situar el déficit por debajo de 3% en 2016 y que el ratio de la deuda pública alcance un máximo en 2015 de 101,7% del PIB, indica la Comisión en su informe.
Para que España se mantenga dentro de los objetivos anunciados, la Comisión recomienda que realice "antes de febrero de 2015, una reducción sistemática del gasto" y antes de que termine 2014 debería "adoptar una reforma fiscal completa" para que "contribuya en mayor medida al crecimiento y creación de empleo".
España, así como Francia, se mantienen dentro del pelotón de 11 países con procedimiento de déficit excesivo, aquel superior a 3% del PIB. Deben adecuarse a este objetivo para 2016 y 2015 respectivamente.