El Fondo Monetario Internacional (FMI) destacó este jueves la "fuerte capacidad de resistencia" de la economía de Colombia, pero alertó sobre varios riesgos, incluyendo la precaria situación de países vecinos.
En un informe al fin de una visita del FMI al abrigo del Artículo IV, el Directorio Ejecutivo de la entidad señaló que "las perspectivas a mediano plazo de Colombia son en general favorables, pero se ven afectadas por elevados riesgos a la baja".
Entre esos riesgos, el FMI mencionó que "las débiles perspectivas económicas de algunos países vecinos de Colombia plantean importantes riesgos".
De acuerdo con el FMI, el PIB de Colombia debe crecer 2,5% este año, pero dos importantes vecinos están en serios problemas: Brasil debe cerrar con baja de 3,5% por segundo año consecutivo, y en Venezuela se prevé un hundimiento de 8,0% en 2016.
Entre los factores de riesgo el FMI mencionó también la "volatilidad en los mercados financieros mundiales -en particular el ajuste económico en China- y la vulnerabilidad a los cambios en las condiciones de los mercados".
También recordó que la caída en los precios del petróleo redujo exportaciones e ingresos fiscales, y que este cuadro "dio lugar a una fuerte depreciación del peso que generó presiones inflacionarias".
En contrapartida, el FMI destacó que la perspectiva real de un acuerdo nacional este año que ponga fin a medio siglo de conflicto armado tendrá efectos positivos en la economía colombiana.
Un acuerdo de paz "podría mejorar aún más la confianza empresas y las entradas de capital, lo cual reforzaría la recuperación que vendrá después del necesario proceso de ajuste", señaló el informe.
Por otra parte, el reporte del FMI destacó la decisión del Banco Central de "endurecer" la política monetaria para guiar la expectativa de inflación hacia el rango fijado como meta".
Colombia había cerrado 2015 con una inflación de 5,0% y la expectativa es que en 2016 se eleve a 7,5%, aunque el Banco Central trabaja con una meta inflacionaria de 3%, con un margen de un punto porcentual.
Por ello, el FMI señaló que para conducir la trayectoria de la inflación hacia la meta "quizá se requiera un endurecimiento adicional de las políticas si las condiciones lo justifican", para poder llevar el déficit de cuenta corriente a un nivel de equilibrio de mediano plazo.