Con el objetivo de trabajar mancomunadamente proyectos que mejorarán la movilidad del municipio de Soacha, la Alcaldía Municipal, el Distrito Capital, el departamento de Cundinamarca, la empresa Férrea Regional S.A.S. y la Empresa de Transporte de Tercer Milenio (Transmilenio) firmaron un acuerdo estratégico de movilidad regional para trabajar la gestión del Tren Ligero Regional.
Con la firma de este convenio de voluntades se pretende articular y coordinar las capacidades de planeación, gestión y financiación de las entidades de orden departamental y municipal con el fin de desarrollar el proyecto de Asociación Público-Privada Tren Ligero Regional - RegioTram, Corredor del Sur y en caso de ser viabilizado por la entidad componente.
Los entes territoriales que firmaron este acuerdo de voluntades se comprometen a realizar todas las actividades para lograr el desarrollo del proyecto Tren Ligero. Asimismo apoyar y gestionar las solicitudes realizadas por el concesionario del proyecto de manera eficiente y cumplir con los requerimientos que sean presentados por la interventoría y las entidades públicas encargadas de la supervisión y control de este proyecto.
El Tren Ligero de Soacha partirá de la estación de La Sabana ubicada en el centro de Bogotá y llegará hasta la comuna dos del municipio de Soacha en la zona centro, en el sector de Las Vegas (calle 13 con carrera 13).
El megaproyecto que tendrá un valor cercano a los 2 billones de pesos es el resultado de un trabajo conjunto entre la Alcaldía de Soacha, la Nación, la Gobernación de Cundinamarca, la Alcaldía de Bogotá y la Asociación Público-Privada (APP) conformada por las empresas colombianas Conconcreto y la Empresa de Energía de Bogotá y las firmas españolas Torres Cámara y Vossloh.
A través de dicha APP, el inversionista diseña, construye y administra durante 30 años el sistema.
Y es que si los cronogramas se cumplen y sigue la voluntad política, la Sabana de Bogotá tendrá las primeras líneas del tren de cercanías seguramente mucho antes de que se pongan de acuerdo para el Metro pesado de la capital del país.
Desde hace varias décadas, cuando las líneas del ferrocarril fueron desechadas como fórmula para la movilización y desplazadas por el avión y los vehículos, se ha planteado que sean utilizadas con un metro pesado, un tranvía, línea de Transmilenio, vía de carros, entre otras soluciones que se han quedado archivadas.
Debido a tantos anuncios sobre la utilización de las líneas del ferrocarril, la ciudadanía no cree que sea una realidad, pero en esta ocasión confluyen varios elementos positivos. Uno de los más importantes es que el presidente Juan Manuel Santos en el Pacto por Bogotá dejó plasmado que en “equipo con la Gobernación seguiremos trabajando en la materialización del proyecto regional del Tren de Cercanías que conectará a la ciudad con Soacha, Chía y Zipaquirá”.
Al tiempo que se cambia el paradigma del transporte articulado por la Empresa Férrea Regional al mando de Bogotá y Cundinamarca, se conoció que la Nación también se convertiría en accionista de la empresa para que maneje el proyecto de la primera Línea del Metro pesado para la capital del país.