Liberado de presión tras su primer gol en ocho meses, el alemán Mario Gomez espera ilusionado junto a sus compañeros de la Fiorentina (8ª) a la Juventus de Turín, líder del campeonato italiano, en el partido de la 14ª jornada adelantado a hoy.
“Me he quitado un gran peso”, afirmó el goleador, martirizado por las lesiones y que espera afianzar su confianza ante el vigente triple campeón, que tiene tres puntos de ventaja sobre la Roma (34 frente a 31), que recibe al Sassuolo (10º) mañana.
La Juve llega con una racha de seis victorias, teniendo en cuenta todas las competiciones, y la última refuerza un poco más su confianza.
La Vecchia Signora derrotó al Torino (2-1) a pocos segundos del final del derbi, en inferioridad numérica, gracias a Andrea Pirlo.
Un buen augurio antes de recibir al Atlético Madrid el martes con el objetivo de certificar su pase a los octavos de final de la Liga de Campeones. Le valdría ese día con el empate, pero podría terminar como primera de grupo si gana por dos goles o más.
Aún así, la Viola, uno de los grandes rivales históricos, ya hizo sufrir a los Bianconeri la pasada campaña. La Juve acabó perdiendo por 4-2 en Florencia pase a llegar a ir ganando por 2-0, víctima de un triplete de Giuseppe Rossi.
El Super Mario alemán ya marcó contra la Juve con el Bayern Múnich en la Champions 2009-2010 y el año pasado con la Fiore en la Europa League, aunque su equipo terminaría perdiendo esa eliminatoria./AFP