Finlandia se niega a pagar las deudas de los demás países de la zona euro y se opone a que se comparta la responsabilidad ante las dificultades de algunos Estados miembros, aseguró la ministra finlandesa de Finanzas, Jutta Urpilainen, en el diario financiero Kauppalehti de este viernes.
La ministra aseguró que no es para asumir la responsabilidad colectiva de las deudas ni los riesgos de otros países, "para lo que tenemos que prepararnos".
Según el diario, esta declaración de la ministra podría significar que Finlandia, uno de los pocos países de la zona euro que sigue contando con la máxima nota de solvencia, la triple A, "no se aferrará al euro a cualquier precio y está preparada para cualquier escenario", incluso salirse de la moneda única europea.
Un portavoz de la ministra, Matti Hirvola, desmintió sin embargo este análisis del diario al declarar a la AFP que "cualquier afirmación según la cual Finlandia va a salir del euro es simplemente falsa".
En su entrevista, Urpilainen asegura que "Finlandia se ha comprometido a ser un miembro de la zona euro" y que "el euro es benéfico para Finlandia.
Urpilainen reconoció en una entrevista concedida al diario finlandés Helsingin Sanomat del jueves que Finlandia "representa una línea dura" con los planes de ayuda financiera.
"Somos constructivos y queremos resolver la crisis, pero no a cualquier precio", advirtió.
Helsinki se opone a que el Mecanismo Europeo de Estabilidad (MEDE) compre deuda en el mercado secundario tal como fue acordado en la cumbre de Bruselas el viernes pasado, para apoyar a los países en dificultades, como Italia y España.
El año pasado, Helsinki exigió y obtuvo un acuerdo bilateral con Grecia por el que Atenas le garantiza que cobrará el dinero adelantado para su segundo plan de ayuda.
El jueves, anunció la apertura de negociaciones bilaterales con España con vistas a obtener las mismas garantías a cambio de su participación en el rescate de los bancos españoles en dificultades.