La española Garbiñe Muguruza, subcampeona del torneo en 2015 y campeona de Roland Garros en 2016, y la veterana estadounidense Venus Williams, cinco veces coronada en Londres y otras dos en el Abierto de Estados Unidos, se citaron para una final apasionante el sábado en el torneo de Wimbledon.
Ambas ganaron este jueves en sus respectivos partidos de semifinales en dos sets: Muguruza arrolló a la eslovaca Magdalena Rybarikova (6-1, 6-1), mientras Venus Williams se impuso 6-4 y 6-2 a la británica Johanna Konta.
La mayor de las Williams, de 37 años, no llegaba al último partido del torneo londinense desde 2009.
Entre 2000 y 2008, Venus fue campeona cinco veces en Londres. La exnúmero 1 mundial, ahora 11ª del ránking WTA, ganó otros dos títulos del Grand Slam, en el Abierto de Estados Unidos en 2000 y 2001.
En la pista central, la jugadora estadounidense demostró su potencia en los intercambios y aprovechó la debilidad de la segunda bola de Konta (7ª del mundo), que soñaba con ser la primera británica campeona en Wimbledon desde que lo lograra Virgina Wade en 1977.
El suspense apenas duró medio set. Venus Williams no brindó muchas oportunidades a su rival y sólo tuvo que levantar dos bolas de 'break'.
"Ella (Konta) luchó al máximo, pero creo que mi experiencia me ayudó mucho hoy. Estoy muy contenta", disfrutó Williams, que perdió la final del Abierto de Australia en enero ante su hermana Serena. Esa última, ausente en este Wimbledon al estar embarazada, le derrotó en tres finales en esta cita londinense.
Muguruza se presenta ahora como el último obstáculo para una renacida Venus Williams.
"No será fácil, pero voy a esforzarme todo lo que pueda", prometió la estadounidense, que se convirtió en la jugadora de más edad en llegar a la final de Wimbledon desde que lo lograra su compatriota Martina Navratilova en 1994, antes de perder contra la española Conchita Martínez.
- Fin a la aventura de Rybarikova -
Muguruza, número 15 del mundo, había abierto el baile de semifinales con su victoria lógica y cómoda sobre la eslovaca Magdalena Rybarikova, por un doble 6-1.
La jugadora nacida en Caracas aplastó a su rival en apenas 1 hora y 5 minutos de partido, con un imponente juego desde el fondo de pista, y se garantiza entrar al menos en el Top-8 del circuito a partir del próximo lunes.
"Hoy he jugado muy bien. He saltado a la pista llena de confianza y todo ha ido genial", dijo tras el partido.
"Lo estoy haciendo bien, espero seguir así en el último partido", agregó la tenista, que perdió la final de 2015 ante Serena Williams.
La ganadora de Roland Garros en 2016 hizo gala de un poderoso tenis en la pista central con el que enterró a su rival, 87ª del ránking, que acusó la falta de experiencia en estas grandes citas.
"El partido se anunciaba difícil porque ella (Rybarikova) venía jugando muy bien desde el comienzo del torneo, pero hoy he elevado mi nivel de juego y todo ha salido bien", resumió Garbiñe, que se convirtió en la segunda española, tras Arantxa Sánchez Vicario, en alcanzar dos veces la final de Wimbledon.
Rybarikova -que esta temporada en hierba había firmado 18 victorias por solo una derrota- palideció ante la hispanovenezolana, que fue un vendaval. Letal en el servicio y un martillo desde el fondo.
La eslovaca, pese a haber eliminado en segunda ronda a la actual mejor raqueta del circuito, Karolina Pliskova, nada pudo hacer ante Muguruza, que en Londres cuenta con la extenista Conchita Martínez como entrenadora.
Además de su estado de forma y de su gran juego, Muguruza achacó la incontestable victoria a su "experiencia" en este tipo de escenarios.
"Una vez que ya has estado en estas situaciones, aprendes a manejarlas mejor. Eso, definitivamente, me ha ayudado", razonó.