Según la Fundación Paz y Reconciliación la guerrilla comenzó a reunir comunidades del sur del país para exponer su proyecto.
Por: Andrés Rincón
Periodista El Nuevo Siglo
Uno de los mayores temores que se tuvieron cuando el Gobierno decidió ampliar los diálogos con las Farc comienza a hacerse realidad.
La cercanía de las elecciones despertó el peligro de que la guerrilla use su fuerza militar para hacer proselitismo armado, imponiendo sus candidatos o restringiendo el derecho al voto en las próximas elecciones parlamentarias del 9 de marzo y a la Presidencia.
La probabilidad es alta en la medida en que según la Fundación Paz y Reconciliación la guerrilla comenzó a hacer reuniones políticas en sus áreas de influencia a través de las cuales busca estructurarse como movimiento político.
“Ellos están dedicados más a la actividad social y política en comunidades donde tienen influencia para el proceso de paz. Están en una labor intensa política y en una declinación de la actividad militar con reuniones con la población. Están en una actividad política de prepararse para el proceso de paz, en cómo van a afrontar unos posibles acuerdos”, aseguró Valencia.
A pesar de que según el politólogo en los encuentros no se ejerce presión armada y la guerrilla busca socializar los logros obtenidos en los diálogos con el Gobierno, se prevé que estos sean aprovechados para presionar el voto en favor de determinados candidatos y partidos políticos.
Por esto no descartó que por su cercanía ideológica, el grupo ilegal pida a la población votar por los partidos de izquierda.
“Seguramente en algunas zonas votarán por candidatos de la izquierda en las listas que ya están. Algunos votarían por el Polo y otros por la Alianza Verde que es donde tiene amigos”, dijo.
El especialista afirmó que las Farc vienen realizando dichos encuentros en el sur del país en Putumayo, Caquetá, Cauca y Nariño, y en el oriente en Meta y Arauca.
La Fundación señaló que los encuentros son coordinados por el Partido Comunista y los movimientos bolivarianos. “Ellos tienen una base social a la que le cuentan qué están haciendo”, agregó.
El analista sostuvo que incluso la guerrilla podría plantear una nueva tregua en marzo próximo para permitir el libre desarrollo de las elecciones. “Es posible que a mediados de febrero pueda revisarse cómo se van a comportar en elecciones y es posible que haya una tregua unilateral por toda la campaña electoral”, concluyó.
El director del Centro de Pensamiento y de Seguimiento al Conflicto de la Universidad Nacional, Alejo Vargas, cuestionó la posibilidad al decir que este grupo estaría pensando más en participar en las elecciones regionales de 2015.
“Yo no creo. Creo que muy seguramente van a participar en las elecciones regionales del 2015 cuando se espera que se haya finalizado el acuerdo de paz. Por ahora no creo que estas sean las elecciones de su interés”, dijo Vargas.
Aseguró el académico que “el proselitismo armado nunca es bueno, pero lo han hecho y seguramente lo siguen haciendo en algunas regiones. Sin embargo a veces son rumores provenientes de organismos de seguridad, de fuentes que enrarecen el ambiente. Habrá que ver hasta dónde hay pruebas de que eso esté sucediendo”.
TITULO: Izquierda opina
Omer Calderón, presidente de la Unión Patriótica (UP) dijo estar de acuerdo con que la guerrilla difunda los avances de la Mesa de La Habana.
“Si están difundiendo los temas de los acuerdos no es proselitismo político sino de paz, por lo que me parece muy saludable en ese caso. Por otro lado no tengo noticia de que estén apoyando candidatos”, precisó.
No obstante, rechazó cualquier forma de apoyo indirecto de la insurgencia a la campaña de la UP.
“Nosotros no conocemos que se esté obligando a la gente a apoyar determinados candidatos. Si eso llegara a ocurrir, creemos que son actividades contraproducentes. En el caso nuestro no requerimos la presión armada para apoyar nuestra candidatura. Rechazaríamos esos apoyos”, afirmó Calderón.
Por su parte, Antonio Sanguino, copresidente de la Alianza Verde calificó como “impensable” este escenario.
“Es nefasto. Colombia tiene que superar el expediente de hacer política con armas. Precisamente el proceso de paz está dirigido a que se consolide un sistema político pluralista y garantista para las fuerzas de oposición. Rechazamos categóricamente apoyos indirectos de las Farc”, subrayó.
A su vez el senador y cabeza de lista del Polo Democrático a esta Corporación, Jorge Robledo, rechazó el proselitismo armado.
“En general el Polo defiende la idea de que no se debe hacer política con las armas en la mano porque si algo debe ser la política es el ejercicio libre del derecho a votar o a no votar sin que medie ningún elemento de coacción”, declaró Robledo.