Una fábrica de droga sintética, que según el Ejército pertenecía a las Farc, fue allanada el fin de semana en el sur del país, informaron autoridades castrenses, que calificaron el operativo como "un golpe muy importante" para las finanzas de esa guerrilla comunista.
Según un comunicado del Ejército, el complejo cocalero, ubicado en una zona rural del departamento de Putumayo, era manejado por el Frente 48 del Bloque Sur de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), la principal y más antigua guerrilla del país, actualmente en diálogos de paz con el gobierno.
El cristalizadero, compuesto por ocho estructuras de madera y plástico y con instalaciones para 30 personas, tenía capacidad para producir mensualmente unas tres toneladas de cocaína de alta pureza, así como drogas sintéticas, conocidas popularmente como éxtasis, indicó el texto conocido este martes.
"Eso equivale a unos 30.000 millones de pesos (unos 11,7 millones de dólares) mensuales. Es un golpe muy importante para la estructura logística y financiera de las FARC", declaró a periodistas el general Alfonso Vaca, comandante de la brigada de selva 27, a cargo de las operaciones realizadas tras tres meses de labores de inteligencia.
Fuentes militares dijeron a la AFP que es la primera vez que en esa región se encuentra un laboratorio de producción de drogas sintéticas de las FARC.
"Con este hallazgo, se deja en evidencia la nueva modalidad criminal para obtener finanzas ilegales que está implementando este grupo terrorista. La facilidad para moverla por su tamaño, lo rentable del negocio ilegal, así como un nuevo mercado de drogas que se ha abierto, serían algunas de las razones para esta organización comenzar a incursionar en el negocio ilícito de la droga sintética", señaló el comunicado.
Sólo por este concepto, el Frente 48, uno de los que más divisas producen para el Bloque Sur de las FARC según el Ejército, estaría recibiendo mensualmente cerca de 10.000 millones de pesos (3,9 millones de dólares), agregó.
De acuerdo con información de inteligencia militar, la droga era enviada al cartel de Sinaloa, en México.
Colombia, principal productor mundial de cocaína junto a Perú, lleva adelante desde noviembre de 2012 negociaciones con las FARC para poner fin a más de medio siglo de un conflicto armado, que ambas partes reconocieron ha estado alimentado por el narcotráfico.
Tres acuerdos parciales fueron alcanzados en el marco de esas conversaciones con sede en La Habana, entre ellos uno para la solución al problema de las drogas ilícitas, que prevé una campaña de erradicación de los cultivos.
Este martes, el presidente Juan Manuel Santos, artífice de los diálogos, se refirió al tema al inaugurar un foro internacional sobre la lucha antidrogas.
"Si se firma la paz, lograremos que la contraparte, el adversario que se lucra del narcotráfico, de las drogas ilícitas, que defiende el negocio, sea ahora parte de la construcción de esa solución", dijo sobre las FARC.