Alcalde Peñalosa aseguró que la norma no regirá hasta que se conozcan los estudios técnicos de la Secretaría de Movilidad, que se están realizando según el resultado de la medida implementada durante la visita del Papa. Gremios económicos y expertos no ven viable esta opción.
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Extender todo el día el Pico y Placa en Bogotá es nuevamente el foco de atención y debate respecto a la movilidad en la ciudad, tras la medida implementada el pasado jueves durante la estadía del papa Francisco en la capital del país con el fin de ayudar a mejorar la movilidad, lo que representantes de diversos gremios económicos y expertos no comparten.
Dicha insinuación fue hecha por el alcalde Enrique Peñalosa, quien aseguró que “de 10 personas 9 están de acuerdo con que se cambie esta restricción, que empezaría desde las 6:00 a.m. hasta las 7:30 p.m., la realidad es que ha habido un apoyo ciudadano muy grande a lo que tuvimos la semana pasada, pero todavía no tengo las conclusiones finales de los estudios de la Secretaría de Movilidad”, contó Peñalosa, quien afirma que la medida “permite que los buses operen mucho más rápidamente especialmente en sectores donde las vías son angostas”.
Peñalosa además aseguró que la norma no regirá hasta que se conozcan los estudios técnicos de la Secretaría de Movilidad, que se están realizando frente a la propuesta. "Lo que recibimos es que de cada diez personas, o por lo menos que me dijeron a mí, nueve decían que dejemos el Pico y Placa todo el día", afirmó el Mandatario.
Sería una inmensa afectación: Fenalco
Al respecto, EL NUEVO SIGLO consultó las implicaciones de volver a poner Pico y Placa todo el día.
Juan Esteban Orrego, presidente de Fenalco en Bogotá, afirmó que “sería una inmensa afectación, no solamente para el comercio, sino para los ciudadanos en general. Tanto para los que se movilizan en vehículos particulares como los que utilizan el transporte público porque no hay cómo atender la sobredemanda de transporte público que esto generaría y obviamente terminaría afectando la parte económica porque la gente se tendría que concentrar única y exclusivamente en ver cómo soluciona sus problemas de movilidad, dado que sabemos que nuestro sistema de transporte público en Bogotá todavía no alcanza a abastecer las necesidades que se tienen”.
“En Bogotá no hay cómo atender la sobredemanda de transporte público si se extiende el Pico y Placa: Fenalco Bogotá”
Orrego además subrayó, “no veo muy viable comprar más vehículos porque el efecto que tendría sería negativo, recordemos que el Pico y Placa es una medida que se estableció de manera temporal para mejorar la malla vial e incrementar la infraestructura vial de Bogotá, todavía no se ha hecho. Creo que se deberían concentrar más bien en eso y en mejorar el transporte público antes que poner más trabas a lo que hoy ya tenemos”.
Decisión debe ser estudiosa y no emotiva: Asopartes
A su vez, Tulio Zuloaga, presidente de Asopartes, afirmó que “hay que ser consecuentes en un estudio muy bien hecho, nosotros creemos que la venida del Papa y expresamente el jueves en Bogotá no puede ser un punto de partida para tomar la decisión. Lo que está pensando el Alcalde me parece más emotivo que estudioso porque mucha gente se fue a la misa campal y otro tanto lo tomó como un día de descanso, entonces el tráfico se bajó muchísimo. En segundo lugar creemos que el Pico y Placa son medidas temporales por algunas situaciones, pero hemos visto que se fue quedando, pasando lo mismo que el 4 x 1000, que empezó en el 2 mil y mire dónde vamos. Nosotros creemos que hay otras soluciones que habría que tomar como por ejemplo mejorar la semaforización que actualmente no está actualizada, es un desastre, están desincronizados, y además hay muchos semáforos vaciados en Bogotá, porque la alcaldía de alguna época atrás se dedicó a poner semáforos porque sí, de modo que hay que estudiar muy bien eso”.
“En tercer lugar hay que cambiar los horarios. Nosotros en concertación con las empresas privadas y el Distrito, deberíamos trabajar de 7:00 a.m., a 4:00 p.m., y las entidades del Distrito de 9:00 a.m. a 6:00 p.m., eso evita el flujo de gente tan tremendo que sucede siempre a las 7:30 a.m., o a las 5:30 p.m., esa sería otra solución. Por supuesto habría que darle un revolcón a la policía de tránsito que sea una reguladora del tránsito, una ponedora de partes y de multas realmente no hace nada”, propuso Zuloaga.
El presidente de Asopartes concluyó que “son muchas cosas por hacer y si las hacemos bien yo creo que no se necesitaría ni siquiera de cualquier Pico y Placa. Hay que poner a funcionar muy bien el SITP porque realmente están en un desastre sobre todo los recorridos están muy mal hechos, entonces hay muchas cosas por mejorar en lugar de tomar decisiones por entusiasmo de un momento”.
Carencia de transporte
Según lo exponen Orrego y Zuloaga, la clave está primero en mejorar el sistema de transporte público. El concejal Emel Rojas se refirió ayer al tema, pues según afirma, “Bogotá tendrá nuevos buses de Transmilenio solo hasta 2021. El ineficaz proceso licitatorio para renovar el 38% de la Flota de Transmilenio representada en la Fase 1 lleva casi 2 años de retraso y no da señales de iniciar prontamente”, dijo el cabildante.
Por otro lado y según una encuesta multipropósito del DANE, el 39% de los segundos carros se compraron por Pico y Placa cuando estaba esa restricción, desde el alcalde Samuel Moreno. El 43% de los terceros carros se compraron por Pico y Placa, solución que el promedio de la población bogotana no podría buscar.
La semana pasada el Concejo hundió un proyecto en el que establecía que las personas que quisieran rodar libremente en Pico y Placa podían pagar una contribución especial para ello. Según la Secretaría de Movilidad, en Bogotá un 15% de los ciudadanos se moviliza en vehículo particular y el objetivo sería que con dicha contribución se pudiera recaudar $1 billón entre el 2017 y el 2020.
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