Posiciones encontradas generó en el Congreso la petición del senador del Partido de Integración Nacional (PIN) Édgar Espíndola al presidente Juan Manuel Santos para que rompa relaciones con Nicaragua a raíz de la nueva demanda que el país centroamericano presentó contra Colombia ante la Corte Internacional de Justicia (CIJ).

Sobre este tema EL NUEVO SIGLO consultó las opiniones de los representantes de diferentes bancadas que hacen parte de las comisiones segundas que manejan temas internacionales.

Al respecto, el presidente de la Cámara de Representantes, Hernán Penagos, del Partido de La U, descartó la posibilidad y dijo que hay que agotar las vías diplomáticas.

“Creo que la estrategia del Gobierno nacional no puede ser romper, de manera abrupta, relaciones con Nicaragua. Muy a pesar de que acompañamos la ejecutabilidad del fallo de la Corte, no debemos perder los canales diplomáticos”, precisó Penagos.

El Congresista manifestó que tomar esa decisión le traería graves consecuencias al país. “Siempre tendremos que tener abierta la posibilidad de resolver diplomáticamente las diferencias que hay entre Nicaragua y Colombia. Romper de tajo las relaciones, es romper de tajo la posibilidad de acuerdos amistosos y adentrarnos en escenarios muy difíciles que puede tener consecuencias funestas”, explicó.

Por el contrario, el senador conservador Carlos Barriga, quien ejerce como vicepresidente del Senado, afirmó estar de acuerdo con la ruptura de relaciones en la medida en que con la reciente demanda, Nicaragua se ha convertido en un mal vecino.

“Estoy de acuerdo. Yo creo que mal haría Colombia en mantener relaciones con ellos porque nos está creando inconvenientes permanentes a través de todas las demandas. Nicaragua está tratando de usurparnos, de seguir avanzando, convirtiéndose en una nación expansionista”, sostuvo.

Barriga indicó que con la nación centroamericana pasa como cuando se invita a un amigo a la casa y termina llevándose la mujer. “A Colombia le pasa como cuando uno le da posada a un amigo y el invitado termina quedándose con la mujer y con la hija. Con el acuerdo Esguerra Bárcenas entregamos la costa de Mosquitos y acordamos el meridiano 82 como la línea limítrofe. Además de eso pretenden continuar con la plataforma continental. Yo respaldaría que el Gobierno nacional rompa relaciones con Nicaragua hasta que ellos no tengan una posición clara y de respeto ante Colombia”, enfatizó el Senador.

Inconducente

A su turno,  el senador liberal Guillermo García dijo que el país tiene muchos más instrumentos por aplicar antes de romper relaciones con el Gobierno de Daniel Ortega.

“Tomar una decisión en ese sentido implicaría que tuviéramos más instrumentos para dirimir el referendo con Nicaragua y eso no puede ser interpretado de esta manera. Colombia tiene muchas estrategias por aplicar. Está bien orientada la Canciller, está bien orientado el Gobierno para seguir adelante con la estrategia que el Gobierno señaló sobre la inaplicabilidad del fallo. Creo que por ahora Colombia debe mantener su embajador en Nicaragua”, expresó García.

Por último, el representante del Polo Democrático Iván Cepeda, calificó como “inconducente” la propuesta planteada por Espíndola.  “Siempre he sostenido que la única manera de resolver los problemas que hay con Nicaragua es la vía del diálogo y creo que esa es la vía que es necesario desarrollar. No es un momento para salir con declaraciones exaltadas, no hay que prestarse para esos juegos. Es una propuesta totalmente inconducente en un contexto en el cual hay que buscar resolver de una manera dialogada el problema”.

 “Plataforma no es negociable”

Ayer el presidente Juan Manuel Santos reiteró su rechazo a las nuevas pretensiones de Nicaragua al afirmar que“la plataforma continental colombiana no es negociable”.“Es una demanda nueva, que nos pareció un acto inamistoso en el sentido de que no tiene ni pies ni cabeza”, señaló Santos.

“Es una demanda nueva, que nos pareció un acto inamistoso en el sentido de que no tiene ni pies ni cabeza”, aseguró el Mandatario a RCN Radio.

Explicó que el Archipiélago de San Andrés y Providencia genera una plataforma que llega hasta el territorio continental colombiano. “Hemos sido muy claros en el sentido de señalar que las dos plataformas, la de San Andrés y la de Colombia continental, se juntan y de hecho se conforma una plataforma única e integral desde San Andrés hasta Cartagena, Barranquilla, Santa Marta, hasta la costa continental colombiana, y eso lo defenderemos, como dije ayer, a capa y espada. Eso no tiene ningún tipo de discusión, no es negociable", puntualizó.