Los bancos de la zona euro devolverán a partir del miércoles más de un cuarto del primer préstamo a largo plazo (LTRO) de casi 500.000 millones de euros que les había otorgado el Banco Central Europeo (BCE) el año pasado en plena crisis de liquidez, un paso precipitado o el signo del regreso de la confianza, según los analistas.
El BCE anunció ayer que 278 bancos de la zona euro devolverán por adelantado, el 30 de enero, 137.160 millones de euros de los 468.000 millones de préstamos a tres años de diciembre de 2011. Es más de lo que esperaban los analistas, que pronosticaban un reembolso de 100.000 millones de euros.
La operación de diciembre de 2011, seguida por otra similar en febrero de 2012 en la que 800 entidades se endeudaron con el BCE por 529.000 millones de euros, había sido decidida por la institución de Fráncfort para intentar remediar una crisis de confianza que amenazaba a los bancos de la zona euro, incapaces de hallar liquidez en el mercado interbancario, consecuencia directa de la crisis de la deuda.
Al prestar a los bancos con estos plazos inéditos -hasta entonces el BCE sólo había prestado como máximo a 13 meses- y tasas imposibles de igualar, el BCE ponía en manos de las entidades las herramientas para desatar los cordones de la bolsa y prestar más a las empresas y hogares para sostener el crecimiento.
Este objetivo no fue totalmente alcanzado, según reconoció el presidente del BCE Mario Draghi.
Ante la mejoría sustancial del mercado interbancario, muchos bancos dijeron en las últimas semanas que querían reembolsar de manera anticipada este dinero, para mostrar que van bien.
"Algunos bancos quieren utilizar estos reembolsos para inflar los músculos", según una fuente bancaria.