Los dirigentes europeos quieren, a partir de mañana, luchar contra el desempleo de los jóvenes, un flagelo que se extiende por todo el continente y golpea especialmente a países como España o Grecia, cuarta economía de la unión monetaria.
"La lucha inmediata contra el desempleo, sobre todo entre los jóvenes, es clave", dijo el presidente del Consejo Europeo, Herman Van Rompuy.
Más de 26 millones de personas están sin trabajo en Europa, de ellas 5,6 millones son jóvenes menores de 25 años (100.000 más que un año antes). Es tan grave la situación que el presidente estadounidense, Barack Obama, advirtió sobre la amenaza de una "generación perdida".
"Se debe hacer todo lo posible para que los jóvenes que no estén estudiando o trabajando encuentren un trabajo o una formación en los próximos cuatro meses", dice el borrador del próximo Consejo Europeo, que reúne a los 27 jefes de Estado y de gobierno de la UE.
La cara dura
El paro entre los jóvenes se ha convertido en la cara más dramática de la prolongada crisis europea, que ha hundido en la recesión a varios países.
Según datos divulgados en abril, los países más afectados por el desempleo juvenil eran Grecia (62,5%), España (56,4%), Portugal (42,5%), Italia (40,5%) y Francia (26,5%). En cambio, el nivel de paro más bajo entre los jóvenes se registraba en Alemania (7,5%), Austria (8%) y Holanda (10,6%).
A mediados de junio, los ministros de Trabajo y Economía de Italia, Francia, España y Alemania se pusieron de acuerdo para utilizar a partir de 2013 una parte de los 6.000 millones de euros destinados por la UE a luchar entre 2014 y 2020 contra el desempleo de los jóvenes. Eso significa invertir 142 euros por persona para menores de 25 años.
La medida deberá ser aprobada ahora por los 27 dirigentes de la UE. Y si bien es un paso modesto económicamente, tiene un fuerte significado político.
"Simplemente, hay 6.000 millones de euros que serán desbloqueados a partir de 2014 contra el paro de los jóvenes. 6.000 millones en 5-6 años es muy poco", explicó el ministro francés de Trabajo, Michel Sapin.
De ellos, España espera recibir entre 1.500 y 2.000 millones. Los europeos buscan además ampliar la llamada garantía juvenil. Financiada gracias a un fondo social europeo, la medida busca que cualquier joven de menos de 25 años reciba una oferta de empleo "de calidad", o una formación o unas prácticas obligatorias a los cuatro meses de haber concluido sus estudios.
Medidas de apoyo
Durante la cumbre, los europeos debatirán medidas para apoyar a las Pymes, a través del Banco Europeo de Inversiones (BEI) que movilizaría entre 55.000 y 100.000 millones de euros entre 2014 y 2020.
La sequía del trabajo en países como España expulsa a los jóvenes fuera del país, sobre todo a países como Alemania, con el consiguiente impacto en la demografía del país, pues contribuye al envejecimiento de la población. Hay casos dramáticos, como las regiones de Canarias y Ceuta, donde la tasa de desempleo de este colectivo supera ya al 70%.
La CE pidió a los ocho países con más desempleo juvenil que tengan listos para otoño sus planes nacionales de empleo que elaboraron en colaboración con el Ejecutivo comunitario.
Durante la cumbre, la última antes del verano boreal, los europeos quieren además avanzar en la unión monetaria, para romper el nexo entre deuda bancaria y deuda soberana, uno de los pilares para salir rápidamente de la crisis.
Pero son varios analistas y dirigentes que advierten que las medidas de austeridad y reformas estructurales que impone Bruselas desde hace más de tres años no ayudan ni a reactivar el crecimiento ni a generar empleo. Y también está socavando el apoyo al proyecto europeo, como lo demuestra el crecimiento de los partidos nacionalistas o euroescépticos en varios Estados miembros./AFP