Los stocks de crudo retrocedieron la semana pasada en Estados Unidos, según cifras del departamento de Energía (DoE), cuando los analistas esperaban una estabilidad.
Las reservas de crudo se redujeron en 600.000 barriles en la semana finalizada el 10 de mayo, situándose en 394,9 millones de barriles.
Los expertos interrogados por la agencia Dow Jones Newswires estimaban que estas reservas se mantendrían al nivel de la semana anterior, que correspondía a un récord desde 1982, año en el que se inició la publicación de estos datos semanales.
Las reservas de productos destilados por su parte, subieron 2,3 millones de barriles a 119,9 millones de barriles, muy por encima de las expectativas de los analistas que apostaban por un alza de 700.000 barriles.
Los inventarios de gasolina subieron 1,6 millones de barriles, en contra de las proyecciones de los expertos que apostaban por una caída de 700.000 barriles.