La guerrilla dijo que Estados Unidos puede apoyar el proceso de paz para y agradeció el respaldo de un grupo de legisladores norteamericanos a las conversaciones que se desarrollan en La Habana.

La delegación de las Farc en las conversaciones de paz comparte con los legisladores la "consideración en cuanto a que los Estados Unidos pueden apoyar el proceso, ofreciendo un paquete de asistencia diseñado para alcanzar una paz justa y duradera", dice una carta de las Farc a los legisladores, leída a la prensa por Victoria Sandino, que integra la representación guerrillera.

La guerrilla "saluda el gesto altruista de 62 congresistas de los Estados Unidos, que en carta al Secretario de Estado John Kerry han expresado su respaldo al proceso de paz de Colombia, a los esfuerzos de solución política del conflicto", añade.

La misiva está dirigida a los legisladores James P. McGovern, Janice D. Schakowsky, Joseph R. Pitts, John Lewis, Randy K. Weber y "demás congresistas que apoyan el proceso de paz de Colombia", que busca poner fin a un conflicto armado de casi medio siglo.

McGovern y Schakowsky hicieron circular en marzo una carta en apoyo al proceso de paz en Colombia, que luego suscribieron los otros legisladores.

La delegación de las Farc también comparte "la valoración que (los legisladores) hacen de las declaraciones del Departamento de Estado en apoyo al proceso de paz, como sus palabras que abogan por la inclusión del ELN al escenario de las conversaciones" de paz.

Las Farc, que iniciaron las negociaciones de paz con el gobierno el 19 de noviembre, también pidieron a los legisladores apoyo para que Washington permita que se integre a las pláticas de La Habana el dirigente guerrillero Simón Trinidad, preso en Estados Unidos desde diciembre de 2004.

"Solicitamos a ustedes su intervención ante el gobierno de los Estados Unidos para que facilite la presencia de nuestro vocero de paz, Simón Trinidad, prisionero en Florence, Colorado, en la mesa de conversaciones", dice la misiva.

Trinidad, cuyo verdadero nombre es Ricardo Palmera, cumple una condena de 60 años de cárcel en Estados Unidos, bajo cargos de secuestro de tres norteamericanos en Colombia (que ya fueron liberados).

"Estamos seguros que él jugará un papel fundamental en el logro de un acuerdo definitivo que ponga fin a la guerra entre colombianos", dice la carta de las FARC.