Los precios al consumo aumentaron menos de lo previsto en julio en Estados Unidos, según cifras del Departamento del Trabajo publicadas este viernes.
El índice de precios al consumo (CPI) aumentó 0,1%, según datos corregidos de variaciones estacionales y después de haberse estancado en junio. Los analistas esperaban un alza de 0,2%.
Desde mayo, el índice se mantiene por debajo del 2%, el umbral que la Reserva Federal ha establecido como el mínimo necesario para elevar las tasas.
"Espero que las cifras de inflación muestren un poco más de presión al alza de lo que vimos durante los últimos cuatro meses", reconoció también el jueves William Dudley, presidente de la Fed de Nueva York.
Las cifras publicadas el viernes no satisfacen las expectativas de Dudley. El incremento anual del CPI fue de 1,7% hasta julio, tras el 1,6% en junio.
Sin embargo, algunos analistas, señalan que la debilidad del aumento del mes pasado obedeció principalmente a la caída de los precios de la hotelería, que no debería continuar.
"Esto no corresponde con las tasas de ocupación en los hoteles y deberíamos esperar una fuerte recuperación en agosto", dijo Ian Shepherdson, de Pantheon Macroeconomics.