El proyecto de Régimen Departamental que cursa en el Congreso sería modificado por el Gobierno Nacional, aunque los puntos específicos de esos ajustes dependen de una subcomisión conformada por 10 gobernadores.
Incluso, los mandatarios seccionales podrían recomendar el retiro de la iniciativa, aunque esa posibilidad no es bienvenida por el Ejecutivo. El ministro del Interior, Fernando Carrillo, sostuvo que para el gobierno es importante fortalecer el poder regional.
El senador risaraldense Carlos Enrique Soto, del Partido Social de Unidad Nacional (La U), le dijo a EL NUEVO SIGLO que si los ajustes son para mejorar y fortalecer la descentralización de las regiones tendrán todo el apoyo de los legisladores. “Ese proyecto quedó en la Comisión Primera del Senado y no avanzó significativamente”, dijo.
Soto manifestó que dentro de las modificaciones debe haber un fortalecimiento de las asambleas, porque hoy no tienen los dientes suficientes. “Debe existir una mayor autonomía regional”, agregó.
El senador nariñense Manuel Enríquez, del Partido Conservador, aseguró que lo que el Congreso debe hacer es determinar si lo aprueba o lo archiva: “Creo que el Congreso debe tomar una decisión con relación a las iniciativas que están en trámite. Creo que es la responsabilidad del legislativo la de determinar si se continúa o no con el proyecto”.
El congresista del Partido Verde, Jorge Londoño, aseguró que según lo que va quedando en el proyecto hasta el momento es que las asambleas departamentales quedarían facultadas para ejercer control político a las instituciones descentralizadas de jurisdicción nacional. Podrán citar a los directores de estas entidades a debates de control política, una vez al año.
Este nuevo régimen departamental especifica las competencias básicas del departamento, clarifica las relaciones con los demás niveles de gobierno y especialmente con el nivel nacional mediante la celebración de convenios o contratos, plan que les permitirá asumir competencias delegadas en los temas que impliquen o supongan gestión de proyectos de inversión.
El proyecto de reforma al régimen departamental es una de las iniciativas que hacen parte de la llamada revolución territorial promovida por el gobierno del presidente Santos.
El régimen departamental se frenó en la Comisión Primera debido a que los senadores insisten en que primero debe haber un diálogo a fondo con las regiones. Además se discute también el esquema tributario y de otros ingresos que las regiones consideran es insuficiente para atender las múltiples obligaciones que tienen.