El presidente ucraniano, Petro Poroshenko, anunció un cambio en la estrategia militar en el conflicto en el Este, después de que Kiev afirmara que "decenas" de refugiados murieron en un bombardeo de los rebeldes, quienes lo niegan.
"Debemos examinar de nuevo las modalidades de nuestra operación militar, a la vista de las nuevas circunstancias", dijo Poroshenko durante una reunión especial con los jefes de las fuerzas de seguridad ucranianas.
La táctica empleada por el Ejército ucraniano hasta ahora consistía en acorralar y asediar los principales bastiones de los insurgentes prorrusos, lo que le ha valido unos combates cada vez más mortíferos tanto para las fuerzas gubernamentales como para los civiles.
Para el ejercito, además, es muy difícil entrar en las ciudades, donde los combates provocarían numerosas víctimas.
Poroshenko solicitó en consecuencia un "reagrupamiento de las fuerzas" para "fragmentar la zona controlada" por los insurgentes e "impedir su avituallamiento de armas y equipamiento" a través de la frontera con Rusia.
Poroshenko también confirmó las declaraciones del "primer ministro" insurgente, Alexandre Zajarchenko, quien aseguró haber recibido el viernes blindados y 1.200 soldados entrenados en Rusia durante cuatro meses, una información desmentida por Moscú.
"Parte de ese material ha sido destruido. Tomamos medidas para que el resto lo sea", aseguró el presidente ucraniano.
- "Decenas" de refugiados muertos -
Ucrania acusó también este lunes a los separatistas prorrusos de haber causado "numerosos muertos" en un ataque con lanzacohetes múltiples Grads contra una columna de refugiados en el este, cerca del bastión separatista de Lugansk.
Según el portavoz militar Andrei Lysenko, la columna se encontraba en la carretera entre Jriashtsuvat y Novosvitlivka después de haber tomado un corredor humanitario en el norte de Lugansk por el cual han huido de la ciudad más de 1.800 personas en dos días.
Lysenko apuntó que los refugiados enarbolaban banderas blancas y que entre ellos había muchas mujeres y niños.
La columna llegó a "zona de combates" en un momento en que los rebeldes contraatacaban a las fuerzas gubernamentales en la localidad de Jriashtsuvat.
"No entendemos de dónde viene esta información. Ninguna columna de refugiados ha sido alcanzada en la región de Lugansk. No disparamos a nuestros propios convoyes", se defendió este lunes el "primer ministro" Zajarchenko
Los militares ucranianos intentaban recuperar este lunes de manos insurgentes Lugansk, asediado por el ejército ucraniano, que dio cuenta de nueves soldados muertos y 20 heridos en 24 horas en el Este.
Donetsk, principal bastión separatista asediado por el ejército ucraniano, está privado de agua corriente ya que la línea eléctrica que alimenta su principal usina de tratamiento de aguas fue dañada por disparos.
- "Guerra híbrida" en Ucrania -
En el terreno diplomático, el encuentro que el domingo reunió a los ministros de Asuntos Exteriores de Ucrania, Rusia, Francia y Alemania no registró avances.
Moscú lamentó la falta de resultados en la búsqueda de una solución política para el conflicto, y Kiev advirtió sobre el riesgo de que las discusiones se alarguen para "salir del statu quo".
El secretario general de la OTAN, Anders Fogh Rasmussen, acusó este lunes a Moscú de llevar a cabo una "guerra híbrida" en Ucrania y prometió hacer que la Alianza esté "en mejor forma, más rápida y más ligera para encarar los desafíos futuros".
La jefa del gobierno alemán, Angela Merkel, justificó las sanciones impuestas por Occidente a Rusia, y las consideró "necesarias para para mostrar nuestra seriedad".
Kiev y Occidente acusan a Rusia de suministrar armas y hombres a los insurgentes separatistas o al menos cerrar los ojos sobre estos abastecimientos, lo que Moscú desmiente.
Por otro lado, el convoy de ayuda humanitaria ruso seguía bloqueado el lunes por la noche en la frontera, pese a un acuerdo logrado el sábado entre Kiev y Moscú sobre las modalidades de inspección de los 300 camiones que --según Rusia-- transportan 1.800 toneladas de ayuda para las poblaciones víctimas del conflicto.
La Organización para la Seguridad y la Cooperación en Europa (OSCE) dijo que falta "garantizar las condiciones de seguridad del convoy", algo que Kiev dice que es responsabilidad absoluta de Rusia.