Al Estado de Zimbabue le quedaban la semana pasada solamente 217 dólares en caja tras haber pagado a los funcionarios, indicó el martes el ministro de Finanzas, Tendai Biti.
"La semana pasada, tras haber pagado a los funcionarios, quedaron 217 dólares en las cajas del gobierno", declaró Biti a los periodistas, y les comentó a éstos que sin duda eran más ricos que el propio Estado.
El ministro añadió que a Zimbabue no le queda otra salida que apelar a la generosidad de los donantes internacionales para financiar un referéndum constitucional y las elecciones previstas a fin de año.
Azotada por una hiperinflación en los años 2000, la economía de Zimbabue apenas logra recuperarse tras haber abandonado como moneda el dólar local en abril de 2009. El dólar estadounidense se ha convertido en la moneda de referencia del país.
Pero la recuperación se ve frenada por factores tanto políticos -sanciones contra el régimen del presidente Robert Mugabe, política de "indigenización" que obliga a compañías extranjeras a renunciar a sus participaciones- como financieros (falta de liquidez) o climáticos (sequía).
Así, apenas hay inversores, los turistas han desaparecido y las infraestructuras se caen de viejas, mientras las ricas minas de diamante del país no aportan a las finanzas públicas los dividendos esperados.
AFP