El estadio de Sao Paulo no estará 100% listo como exigió la FIFA y operará con capacidad reducida para el segundo y último test oficial de este domingo, 11 días antes de la inauguración del Mundial-2014 en ese escenario.
El club Corinthians, propietario del estadio, informó este viernes a la AFP que no recibió autorización de los bomberos para vender entradas en una de las tribunas temporales que aún está en "proceso de finalización".
Se autorizó para el domingo la venta de 40.000 entradas en este estadio que reunirá a más de 65.000 hinchas en el Brasil-Croacia del 12 de junio que da inicio al Mundial de fútbol.
El estadio tiene dos tribunas temporales con capacidad para 10.000 espectadores cada una. En la sur, ya terminada, se venderán sólo 5.000 boletos, explicó a la AFP Fast Engenharia, empresa responsable por su instalación.
La norte, que tiene algunos detalles por concluir, estará nuevamente vacía en el partido de este domingo entre Corinthians y Botafogo por le campeonato brasileño.
La FIFA exigió realizar un segundo test en el estadio inaugural de la Copa del Mundo al no quedar satisfecha con los resultados de la primera prueba realizada el 18 de mayo.
En el partido anterior, entre Corinthians y Figueirense, ninguna de las dos tribunas supletorias pudo ser utilizada y el estadio albergó alrededor de 36.000 hinchas.
"Es vital que todas las instalaciones sean probadas en condiciones totales de juegos: tribunas temporarias e instalaciones adyacentes", dijo más tarde el secretario general de la FIFA, Jerome Valcke, en un mensaje en la red social Twitter.
El máximo organismo del fútbol asumió el 21 de mayo el control del estadio de Sao Paulo todavía sin terminar, tras sucesivos retrasos en la entrega del recinto, donde fallecieron tres obreros en dos accidentes.
Además del Arena Corinthians de Sao Paulo, los recintos de Curitiba, Cuiabá, Porto Alegre y Natal aún están inacabados, aunque a diferentes niveles.