La posibilidad de que España pida un rescate a sus pares europeos y las negociaciones de Grecia con sus acreedores dominarán el G20 Finanzas se terminarán de debatir hoy puesto que los ministros están reunidos desde ayer en México, informaron fuentes oficiales.
Sin la presencia del secretario del Tesoro estadounidendese Tim Geithner, los ministros de Finanzas y gobernadores de bancos centrales del G20 buscarán mecanismos para reducir las "incertidumbres" que rodean el crecimiento mundial, indicó el viceministro de Hacienda mexicano, Gerardo Rodríguez Regordosa.
La crisis europea estará en el centro de las discusiones y se espera que los ministros hagan "un balance" de las medidas que viene adoptando la Eurozona para salir del pozo, informó una fuente oficial francesa que pidió el anonimato.
Funcionarios europeos adelantaron que España y Grecia ocuparán buena parte de las discusiones de este grupo de países ricos y emergentes que integran por América Latina Brasil, México y Argentina.
Una fuente alemana señaló que "hay todavía asuntos pendientes que discutir en el seno de la troika (UE, FMI y Banco Central Europeo) y también en el Eurogrupo entre los ministros de Finanzas" para alcanzar una solución duradera para Grecia, que busca persuadir a sus acreedores para que desbloqueen parte de la ayuda prometida, pero sin nuevas medidas de austeridad.
México, que ocupa la presidencia del G20, espera que España aproveche la ocasión para explicar por qué no ha pedido un rescate global a sus socios europeos a través del programa de compra de deuda del Banco Central Europeo (BCE), que le permitiría bajar sus costes de financiamiento.
Para el ministro de Economía español, Luis de Guindos, "va ser una oportunidad para que actualice a todos sobre lo que están pensando y si van a tomar decisiones ahora en el corto plazo", indicó el mexicano Rodríguez Regordosa, en una clara alusión a la falta de decisiones de Madrid.
La búsqueda de clarificaciones por parte de España también fue evocada esta semana por voceros oficiales del gobierno canadiense.
De su lado, los países emergentes volverán a pedir cuentas sobre la postergada reforma de cuotas del Fondo Monetario Internacional.
"Esperamos tener algún avance, algún direccionamiento de hacia dónde va la discusión", explicó el viceministro mexicano, quien reconoció que la reforma, aprobada en 2010, "va tardar más porque el compromiso es hasta 2013 para tener esto".
Argentina por su parte denunciará con dureza a los fondos especulativos -a los que llama "buitres"- luego de que a pedido de uno de estos grupos una de sus fragatas fuera retenida en Ghana a inicios de octubre en busca de cobrar un adeudo del país por 370 millones de dólares.
Precisamente, el primer ministro griego, Antonis Samaras, volvió a amenazar ayer con una posible salida de su país del euro, si el parlamento rechaza las nuevas medidas de austeridad reclamadas por el Fondo Monetario Internacional y la Unión Europea.
El miércoles, el parlamento habrá de pronunciarse sobre una ley marco relativa a recortes presupuestarios y otras reformas, por más de 18.000 millones de euros, y, el próximo domingo, sobre el presupuesto para 2013.
Según Samaras, la aprobación de estos textos es una condición necesaria para que el país haga desaparecer "definitiva y irrevocablemente" el riesgo de salir del euro.
"Tenemos que salvar al país de la catástrofe (...) Si no logramos mantenernos en la zona euro, ya nada tendrá sentido", declaró.
Una fuente gubernamental alemana había asegurado el jueves que varios asuntos quedaban pendientes entre la troika (UE, FMI y Banco Central Europeo) para concluir un acuerdo que permita entregar más fondos a Grecia.
Atenas trata de persuadir a sus acreedores internacionales de los avances realizados en materia de reformas para que desbloqueen el tramo de 31.500 millones de euros, pendiente desde junio, para que el país no caiga en suspensión de pagos.