El gobierno español revisó al alza su previsión de déficit público para 2016, del 2,8% del PIB al 3,6%, afirmó este martes una fuente del ministerio de Economía, precisando que, sin embargo, en 2017 espera quedar bajo la barrera del 3% fijado por Bruselas.
El ministro de Economía, Luis de Guindos, debía presentar ante el Congreso de los Diputados de Madrid las nuevas previsiones económicas y presupuestarias de España, que serán enviadas en mayo a la Comisión Europea.
El déficit público español alcanzó un imprevisto 5% en 2015, lo que convierte a España en uno de los peores alumnos de la Eurozona en esta materia.
Madrid prometió a la Comisión Europea hacer todo lo posible para reducirlo, con un plan de recorte de 2.000 millones de euros en el presupuesto de la administración general del Estado y advirtió de que las regiones deberán aceptar la austeridad.
Sin embargo, según varios economistas, España debería recortar unos 25.000 millones de euros para respetar la regla europea y volver de nuevo bajo el 3% de deuda.
La situación se ve dificultada por el hecho de que cuatro meses después de las legislativas, España sigue teniendo un gobierno en funciones dirigido por el conservador Partido Popular, ante la incapacidad de las fuerzas políticas para formar un ejecutivo de coalición en un parlamento muy fragmentado.
Según sus nuevas previsiones, Madrid espera que la deuda pública equivalga este año al 99,1% del Producto Interior Bruto (PIB) y al 99% en 2017, tras el 99,2% registrado en 2015, según la misma fuente.
Por su parte, el desempleo, el gran punto negro de la economía española, debería pasar este año bajo la barrera del 20%, registrando aún así uno de los peores resultados de la Eurozona, tras Grecia.
De Guindos ya revisó a la baja la semana pasada el objetivo de crecimiento en 2016, del 3,0% al 2,7%.
También redujo en medio punto sus previsiones para 2017, rebajándolas al 2,4%.