España no tendrá “un rescate a la Portuguesa" | El Nuevo Siglo
Miércoles, 26 de Diciembre de 2012

El ministro español de Economía, Luis de Guindos, afirmó este miércoles no excluir una petición en el futuro de ayuda financiera al Banco Central Europeo (BCE), pero aseguró que tal mecanismo sería muy distinto a los rescates solicitados por Portugal e Irlanda.

"No es un rescate a la portuguesa, a la irlandesa (...) esto no es un rescate en absoluto", afirmó en una entrevista con la emisora privada ABC Punto Radio, sobre el programa anunciado en septiembre por el BCE que le permitiría comprar, en el mercado secundario, deuda de los países de la Eurozona que lo soliciten.

Portugal e Irlanda, que ya no logran financiarse en los mercados, tuvieron que recurrir a una ayuda de la Unión Europea y del Fondo Monetario Internacional (FMI) que implica una intervención de sus economías.

El gobierno español, "a fecha de hoy, ha decidido no pedir la asistencia financiera que implica la puesta en marcha de ese programa del BCE" pero "eso no quiere decir, como ha dicho el presidente del gobierno, que no lo pueda pedir a futuro", subrayó De Guindos reafirmando las declaraciones del jefe del ejecutivo, Mariano Rajoy.

El ministro español consideró "excesivo" el diferencial entre los intereses que debe pagar España para financiarse a diez años y los que paga Alemania -la denominada "prima de riesgo"- pero lo atribuyó ante todo a "la existencia de dudas sobre el futuro del euro".

"España, lo que necesita, es que se disipen y se eliminen las dudas sobre el futuro del euro", aseguró, subrayando que actualmente esas inquietudes ya son menores que hace seis meses.

La prima de riesgo mide el grado de desconfianza de los mercados respecto a la deuda de un país. En el caso de España, giraba en torno a los 387 puntos en los últimos días, frente a los más de 600 alcanzados en julio.

El anuncio del programa de compra de deuda del BCE bastó para relajar sensiblemente la tensión de los mercados sobre la deuda española.

De Guindos subrayó asimismo que la política de reducción del déficit público emprendida por el gobierno de Rajoy debe mejorar la percepción del país en los mercados.

"El déficit público se va a reducir sustancialmente este año y eso (...) va a llevar, que es lo fundamental, a que los que nos prestan dinero consideren que una situación que era insostenible, ahora se hace sostenible", afirmó.

El gobierno español empredió un draconiano esfuerzo para reducir su déficit público, que en 2011 alcanzó el 9,4% del PIB. El objetivo oficial para este año es de 6,3%, aunque Rajoy reconoció que sería "complicado" alcanzarlo.

Preguntado sobre la posibilidad de una nueva alza del Impuesto sobre el Valor Añadido (IVA) en 2013, el ministro aseguró que tal medida "no está en absoluto en la mesa".

Entre las medidas decididas en 2012 para aumentar los ingresos, el gobierno español aumentó ese impuesto directo: su tasa principal pasó de 18% a 21% mientras que algunos productos y servicios pasaron del tipo reducido de 8% al general de 21%.