Volviendo a beneficiarse de intereses en fuerte baja, el Tesoro español colocó este jueves 4.504,89 millones de euros (unos 6.014 millones de dólares) en deuda pública a medio y largo plazo, según datos del Banco de España.
Confirmando la distensión de los mercados, España emitió 2.409,28 millones en bonos a tres años con un interés de 2,713%, frente a 3,358% en la anterior emisión comparable, realizada el 13 de diciembre.
Colocó asimismo 1.583,54 millones de euros en títulos a cinco años pagando 3,77% (frente a 3,988% el 10 de enero) y 512,07 millones con vencimiento en 2041 y un rendimiento de 5,696% (6,002% en mayo de 2011).
El país alcanzó así el máximo previsto para esta emisión, con una horquilla entre 3.500 y 4.500 millones de euros, gracias a una demanda que duplicó la oferta.
"La resolución de la subasta de hoy indica que el Tesoro se está financiando con relativa comodidad en este principio de año, con bajadas de tipos en todos los plazos y un elevado volumen de demanda por parte de los inversores", subrayó el ministerio de Economía en un comunicado.
Esto es "reflejo de una cierta mejoría en la percepción de los mercados sobre las reformas adoptadas por España, que están contribuyendo a sentar las bases de la recuperación futura", consideró.
En otra muestra de la creciente confianza de los inversores, en el mercado secundario -donde se negocia la deuda ya emitida- el interés del bono español a 10 años se situaba el jueves por la mañana en 5,010% tras haber llegado a superar el 7% en julio.
Por su parte, la prima de riesgo española -la diferencia entre lo que deben pagar España y Alemania por financiarse a 10 años- bajaba hasta 340 puntos básicos, lejos de los máximos de 650 alcanzados durante el verano boreal.
Cuarta economía de la Eurozona, España se beneficia recientemente de una menor tensión en los mercados tras un año 2012 marcado por una gran desconfianza de los inversores. La presión alcanzó niveles récord durante el verano, cuando muchos analistas pensaban que el país se vería obligado a solicitar un rescate de su economía.
Aprovechando esta distensión, el jefe del gobierno español volvió a afirmar esta semana que de momento no tiene intención de pedir ayuda financiera a sus socios de la zona euro.
En su primera incursión de 2013 en el mercado de deuda, hace una semana, el Tesoro había superado con creces (5.816 millones de euros) su objetivo de emisión de entre 4.000 y 5.000, una bocanada de oxígeno para las finanzas de un país donde persisten los problemas económicos: en recesión desde hace más de un año, su desempleo supera el 25%.
Desde principios de año, ya colocó el 9,4% del total de 121.300 millones de euros previsto para 2013 en títulos a medio y largo plazo, precisó el comunicado del ministerio de Economía.
AFP