España y México se enfrentan esta tarde en Estambul en un partido que servirá para abrir los octavos de final del Mundial Sub-20 de fútbol de Turquía y que se presenta como el choque más atractivo de esta ronda, entre dos de los teóricos favoritos al título.
Los mexicanos sufrieron para clasificarse dentro del grupo D, donde perdieron los dos primeros partidos (Grecia 2-1, Paraguay 1-0) y luego tuvieron que golear en la última jornada a Mali (4-1), por lo que se vieron relegados al tercer lugar y a enfrentarse ahora con uno de los gigantes del torneo.
España se presenta como un obstáculo de primer nivel, después de haber ganado con autoridad en el 'grupo de la muerte' , el A, y de haber sido el único equipo en contar sus partidos de la primera fase por victorias.
Pero México no se acobarda y después de haber salvado el 'match-point' del partido ante los malienses el equipo está eufórico y lleno de confianza en sus posibilidades de llegar lejos.
"El equipo viene al alza, viene mejor para enfrentar a un gran rival, del que conocemos su sistema. Creo que va a ser un partido interesante y atractivo para todos", analizó el seleccionador mexicano, Sergio Almaguer.
Los españoles llegaron a la última jornada de la primera fase en una situación muy diferente, ya clasificados matemáticamente para octavos, con lo que el seleccionador Julen Lopetegui se dio el lujo de dar descanso a varios titulares, entre ellos Gerard Deulofeu, Javier Manquillo o Juan Bernat.
En México, la dupla ofensiva Marco Bueno-Jesús Corona se reencontró con el gol en el partido ante los malienses y Jorge Espericueta volverá a asumir el papel de líder en la construcción del juego, después de ser uno de los jugadores más destacados del equipo en la primera fase. AFP