Un viaducto inaugurado el pasado 23 de diciembre, que conectaba las ciudades sicilianas de Palermo y Catania, se hundió tan sólo una semana después de su apertura, lo que generó escándalo e indignación este lunes en Italia.
"He pedido que me comuniquen el nombre del responsable. Tendrá que pagar todo. La fiesta se acabó", escribió indignado en un tuit el jefe de gobierno, Matteo Renzi, tras prometer mano dura contra la corrupción y la ineficiencia generalizada.
Según la web de la empresa que administra las autopistas (ANAS), una de las pistas de la carretera de doble vía se hundió de unos 50 centímetros justo a la entrada del viaducto, mientras la otra calzada presenta grietas notables.
La carretera, que costó unos 13 millones de euros, forma parte de un proyecto para modernizar el sistema de carreteras de Sicilia, tradicionalmente escaso.
Las autoridades iniciaron una serie de investigaciones sobre el hundimiento, que si bien no provocó muertos ni heridos, resulta un emblema de negligencia.
El ministro de Transporte, Maurizio Lupi, calificó el hecho de "inaudito e inaceptable".
La fiscalía de la región nombró un grupo de peritos y técnicos para que determinen las razones del hundimiento.
Por su parte el movimiento antisistema Cinco Estrellas pidió la renuncia del ministro de Transportes y exige que se establezca si las empresas encargadas de la obra tienen conexiones con la mafia, tradicionalmente involucrada en licitaciones y obras públicas locales/AFP.
Nota: foto de www.vanguardia.com