Escalada de intereses no pararía hasta llegar a 7% | El Nuevo Siglo
Viernes, 19 de Febrero de 2016

Hasta una cifra de 7% podría llegar el incremento en las tasas de interés este año, de acuerdo con las previsiones de los mercados financieros.

 

Política Monetaria. Ayer, la Junta Directiva del Banco de la República subió otro 0,25% las tasas de referencia y las elevó a 6,25%.

 

Esta postura de un ajuste más drástico en la política monetaria, tiene como objetivo frenar en parte la demanda del consumo que actualmente se encuentra en altos niveles y para evitar que los colombianos sean juiciosos en su nivel de endeudamiento.

 

De acuerdo con los analistas de CorpBanca Económico “nos inclinamos por una senda de aumentos moderados, teniendo en cuenta no solo la amplitud que el ciclo alcista ha mostrado hasta el momento, sino que también la Junta deberá empezar a considerar el marcado declive en la confianza del consumidor, así como la moderación en el crecimiento de la cartera de consumo, que podrían empezar a brindar señales de moderación de la demanda interna. De igual manera, creemos que los aumentos graduales hasta 7% contribuirían a la incorporación del nuevo escenario de precios del petróleo, al tiempo que se monitorean los efectos del ajuste monetario iniciado en el segundo semestre de 2015”.

 

El derrotero

Señalan los expertos que una de las pendientes que deben marcar este derrotero de los intereses, es el comportamiento de la inflación. “En adelante estaremos al tanto de la publicación del Informe de Inflación por parte del Banco de la República, el cual evidenciaría de forma más clara la divergencia por la que atraviesa el país entre una aceleración de la inflación, versus una desaceleración moderada en el crecimiento. Asimismo hay que esperar la consolidación de datos clave en marzo como el PIB de cierre de 2015 y la publicación de balanza de pagos y cuenta corriente para el último trimestre de este año pasado”.

 

“El ciclo alcista en política monetaria tuvo continuidad a inicio de 2016 cuando en la Junta del 29 de enero los miembros del comité decidieron incrementar en 25 puntos la tasa de intervención hasta 6%. Con este movimiento, se completaron 150 puntos básicos de aumento en la tasa Repo, en un escenario de desanclaje de expectativas”.

 

Las amenazas

De otro lado, en algunos momentos los codirectores han coincidido en que la persistencia de la devaluación, la llegada del fenómeno del Niño y los procesos de indexación, mantendrían elevada la inflación en el primer semestre del año.

 

En este sentido, los riesgos sobre un aumento de las expectativas continúan latentes, más aún si el peso colombiano sigue devaluándose en respuesta a mayores desvalorizaciones en la cotización del crudo. Teniendo en cuenta lo anterior, desde enero el Emisor ya descontaba elevados niveles de inflación esperada, especialmente la derivada de papeles de deuda pública que en ese momento era superior a 4,5%.

 

En cuanto a crecimiento, el Emisor esperaba que se registrara una mayor desaceleración de la demanda interna que corresponda al nuevo escenario de términos de intercambio, y en ese sentido recortó su pronóstico de PIB para este año a 2,7% en un rango entre 1,5% y 3,2%.

 

De seguido, se observa que el análisis de cuenta corriente está jugando un papel preponderante dado que anotaría al menos 6,3% en 2015 y para 2016 el equipo técnico proyecta se ubique entre 5,4% y 6,5%, en medio de un mayor deterioro de las exportaciones.

 

Senda alcista

 

Como se mencionó, hasta este punto parece darse un consenso en la Junta que ha de mantenerse una senda alcista en la tasa de interés para impulsar “la convergencia de las expectativas y de las proyecciones de inflación a la meta en el horizonte de política, y va en línea con una reducción del déficit de la cuenta corriente”.

 

Sin embargo, la magnitud de los ajustes continúa siendo divergente. Los más moderados optan por una senda de incrementos de 25 puntos básicos, pero de forma gradual que permita al mercado tener una mejor lectura del Banco Central e incorporar más fácilmente los cambios. Este grupo a la vez argumenta que en esta ocasión la transmisión de la política monetaria se habría dado de forma más rápida a cierre del trimestre pasado. Por su parte, otros miembros con un tono más alcista, han abogado por un aumento de 50 puntos básicos haciendo énfasis en la necesidad de dar credibilidad a la política monetaria en un escenario de elevado déficit en cuenta corriente.

 

En este nuevo nivel de ascenso de los intereses, sería coherente con la mayor caída en los términos de intercambio, que se traduce en una ampliación de la devaluación, presión alcista en los precios y las expectativas de inflación.

Bajo este panorama, es que algunos expertos decidieron recortar la meta de crecimiento, como es el caso de los analistas de CorpBanca.

 

“A pesar de que recortamos nuestra previsión de crecimiento a 2,7%, el deterioro del escenario externo nos conduce a aumentar el nivel de tipo de cambio esperado de cierre hasta $3.350 y extender nuestra previsión de inflación máxima del año a 8,5% para cerrar 2016 alrededor de 5,16%. Bajo estas nuevas condiciones, en las cuales se hace más contundente el aumento del IPC que la desaceleración de la actividad, prevemos que el Emisor daría continuidad a su proceso alcista de los intereses hasta mayo”.

 

De ser así, el nivel de tasa sería el más elevado desde mediados de 2009, pero aún sin alcanzar el máximo de diciembre de 2008 de 10%.

 

La inflación

Para la decisión de ayer, la Junta tomó en consideración principalmente que en enero la inflación anual al consumidor se situó en 7,45% y el promedio de las cuatro medidas de inflación básica en 5,73%, superando los pronósticos del equipo técnico del Banco. Las medidas de expectativas de inflación se mantienen elevadas: las de los analistas a uno y dos años se sitúan en 4,5% y 3,7%, respectivamente, y las que se derivan de los papeles de deuda pública a 2, 3 y 5 años se encuentran entre 4,5% y 5%.

 

Asimismo, el incremento en los precios de los alimentos, así como la mayor depreciación nominal y su transmisión parcial a los precios al consumidor explican el aumento de la inflación en enero. Pese a tratarse de choques temporales, la magnitud de la devaluación del peso y la fortaleza del fenómeno del Niño elevan el riesgo de una convergencia más lenta de la inflación a la meta, tanto por su impacto directo sobre los precios y las expectativas de inflación, como por la posible activación de mecanismos de indexación.

 

Además, el precio del petróleo sigue volátil y se mantiene por debajo de lo proyectado para el presente año. La aversión global al riesgo ha aumentado. En este entorno, las economías más grandes de América Latina volvieron a registrar incrementos en sus primas de riesgo y sus monedas se depreciaron frente al dólar.

 

Indican los directivos que los nuevos descensos en los precios del petróleo siguen deteriorando los términos de intercambio y se reflejan en una caída adicional del ingreso nacional y, especialmente, del ingreso público. En la medida que parte de esta caída es duradera, se requiere un ajuste permanente del gasto interno de la economía, para lo cual medidas de política fiscal son el instrumento más efectivo.

 

En este sentido, los recortes anunciados de gasto público y el firme compromiso del Gobierno de presentar una reforma tributaria estructural en 2016 son medidas necesarias para que la economía se ajuste a los nuevos niveles de ingreso.

 

Las cifras más recientes de la actividad económica sugieren que el crecimiento del producto en el cuarto trimestre de 2015 fue similar al registrado en el tercero. El dinamismo del consumo y la inversión habría sido menor, pero las exportaciones netas habrían tenido un aporte positivo al crecimiento. Para todo 2015 se proyecta un crecimiento de 3% como cifra más probable, contenida en un rango entre 2,8% y 3,2%.

 

La Junta Directiva decidió continuar con la senda de incrementos de 25 puntos en la tasa de interés de referencia y estará particularmente atenta al comportamiento de la inflación y sus expectativas para garantizar la convergencia de la inflación a su meta en el año 2017. Al mismo tiempo, los recortes anunciados de gasto público y el firme compromiso del Gobierno nacional de presentar una reforma tributaria estructural este año, contribuyen a reducir el déficit de cuenta corriente y las presiones inflacionarias.

 

Por otra parte, buscando mitigar el impacto de una sobrerreacción de la tasa de cambio en las expectativas de inflación y contribuir a preservar las condiciones de liquidez del mercado cambiario, la Junta decidió modificar el porcentaje para la activación de la subasta de opciones de desacumulación de reservas internacionales y del ejercicio de estas de 5% a 3%. El resto de condiciones del mecanismo se mantiene inalterado. La Junta reitera su compromiso con la meta de inflación y mantiene un cuidadoso monitoreo del comportamiento y proyecciones de la actividad económica e inflación en el país, de los mercados de activos y de la situación internacional.