La excongresista estuvo un año privada de la libertad en el Centro de Estudios de la Policía Nacional, en el norte de la capital, mientras se adelantaba en su contra un proceso por presuntas irregularidades en la adquisición de terrenos baldíos en el Valle del Cauca.
A su salida de las instalaciones, la exparlamentaria manifestó su alegría de recuperar la libertad debido a que va a poder reencontrarse con sus familiares. Toro además señaló que va a demostrar su inocencia y que está siendo víctima de un cartel de falsos testigos.
Cabe recordar que fue ayer que recibió la notificación de su libertad por parte del vicefiscal general, José Fernando Perdomo, donde se le concede dicho beneficio pagando una fianza cercana a los 500 millones de pesos y firmando un compromiso de asistencia a las audiencias próximas.