La metamorfosis sufrida por el secuestro en los últimos años ha impedido que sea erradicado a pesar de los esfuerzos de las autoridades y, de acuerdo con los Gaula y la Fundación País Libre, en lo corrido de 2014 se contabilizan 245 casos.

Sin embargo, la ONG denuncia que aunque se ha reducido el flagelo del plagio, ha ido en aumento la extorsión.

Las mismas estadísticas indican que en los últimos 11 años fueron secuestrados 5.540 ciudadanos, entre ellos 2.874 calificados como extorsivos, al tiempo que fueron rescatados en operaciones de los Grupos Gaula del Ejército, de la Infantería de Marina y de la Policía 1.471. 

Este delito se incrementó en la década de los 80 con el crecimiento y fortalecimiento de las Farc, Eln y Epl, para financiar sus actividades al margen de la ley y la adquisición del material de guerra.

A esta actividad también se sumó la delincuencia común para exigir, al igual que la guerrilla, millonarias sumas de dinero por la libertad de ejecutivos de multinacionales, ganaderos, finqueros, hacendados, líderes religiosos, políticos y ciudadanos de bien.

Las cifras se redujeron considerablemente en los últimos años, pero preocupa a las autoridades el secuestro a nivel urbano y rural y el miedo de algunos ciudadanos para denunciar el plagio de sus seres queridos.

El llamado paseo millonario y el secuestro exprés se mantienen en las principales ciudades del país, aunque registran importantes reducciones después de la captura de los 7 integrantes de la red que asesinó al agente de la DEA, James Watson, en la zona rosa, al norte de Bogotá. Los capturados fueron extraditados a los Estados Unidos.

Según los servicios de inteligencia, las redes de secuestradores utilizan, en muchos casos, células en un esfuerzo para burlar la acción de las autoridades y organismos secretos.

“Los integrantes de una de esas células son los que se encargan de seguir los movimientos cotidianos de la eventual víctima durante días, semanas e incluso meses, con la finalidad de conocer sus rutas de tránsito y horarios habituales para así lograr con mayor éxito su acción criminal. Otros son los que ejecutan el secuestro con la información de inteligencia obtenida, mientras que otra estructura se encarga de los alimentos y vigilancia del secuestrado e incluso del cambio de lugar para evitar la acción de las autoridades y una cuarta fracción se encarga de entablar las negociaciones con los familiares de la víctima”, explican los servicios de inteligencia.

Y, agregan, otras redes criminales están involucradas en todo el accionar criminal.

El director del Grupo Gaula de la Policía, coronel Fabio López, dijo que gracias a la tecnología de punta y a la experiencia que tienen los investigadores y que las familias de las víctimas están denunciando, se viene haciendo frente a esa modalidad criminal que en principio era liderada por la guerrilla y otros grupos armados al margen de la ley, como los paramilitares, en el pasado y ahora las Bacrim, y en última instancia la delincuencia común.

Sin embargo, dijo, desde hace varios años, se invirtió el proceso y ese flagelo ahora es encabezado por la delincuencia común.

Explicó el coronel López que “hoy hay un buen trabajo, hay unos resultados con la desarticulación de bandas de secuestradores, porque en los Gaula se trabaja las 24 horas del día. Para nosotros no existen los dominicales ni festivos. Trabajamos 24 por siete”.

Cifras claras

En cuanto a las cifras en la lucha contra el secuestro, dijo que son claras y precisas: en el año 2000 registrábamos 3.522 secuestros, pero en los últimos cinco años la cifra baja de los 305 casos.

“De 3.522 secuestros en el año 2000 pasamos en el 2004 a 1.440; en el 2005, a 801;en 2006 pasamos a 690; en 2007, continúa el descenso a 523; en 2008, 437 y, desde el 2009 las cifras empezaron a caer drásticamente, pues se registraron 213 casos; en 2010 hubo un incremento de 69 casos, es decir, 282; y, en 2011 y 2012 se presentaron 305 secuestros en cada uno; en el 2013 ocurrieron 299 y en lo corrido del presente año, 245 casos”, señaló.

Las cifras registran que en ese mismo lapso ocurrieron 2.598 secuestros simples, 2.874 extorsivos y 1.421 personas, entre hombres, mujeres y niños fueron rescatados por la acción de los Grupos Gaula.

Las estadísticas del Ministerio de Defensa Nacional consignan que en el año 2013 fueron asesinados por sus captores cinco secuestrados y desde el 1º de enero a la fecha, 15.

La información oficial registra que el año pasado 9 ciudadanos fueron liberados por los delincuentes debido a la presión de las autoridades y en lo corrido del año 10, mientras que en el 2013 se fugaron 19 plagiados y nueve ciudadanos lograron escapar a la acción de sus captores en el 2014.

“En los dos últimos años registramos una disminución del 9% en materia de secuestros”, explicó.

El coronel López dijo que “hemos logrado capturar este año por orden judicial a 306 personas, sindicadas de secuestro y en flagrancia a 162, al tiempo que hemos rescatado a 86 personas y otras cinco por presión”.

El oficial informó que actualmente las personas más afectadas por el flagelo del secuestro son los comerciantes. 

“Hoy los mayores secuestradores son las redes de delincuentes comunes con un 66%, seguidos por el Eln con un 12%, o sea 29 casos; luego las Farc con el 10%, es decir con 25 casos y finalmente las bandas criminales al servicio del narcotráfico, Bacrim, con el 2%”, indicó.

Explicó que “las cifras están sujetas a variaciones, son más reales o verdaderas, porque cada caso se investiga a profundidad, ya sea un secuestro simple o extorsivo. Este año registramos 134 secuestros extorsivos y 111 secuestros simples, para un total de 245 casos. Aquí registramos la presentación de la denuncia por parte de los familiares de las víctimas, pero hay dificultades cuando los familiares de las víctimas no denuncian. Igual suerte se corre en materia de extorsiones”.

Dijo que “ya casi no se registran casos de la antigua modalidad de la delincuencia común de secuestrar a importantes ciudadanos y luego venderlos a la guerrilla”.

País Libre

Para la Fundación País Libre, el secuestro continúa sin variación en los últimos años, es decir, se registra un promedio de 300 personas en poder de la delincuencia común y de los grupos armados al margen de la ley.

La Directora Ejecutiva de la Fundación, María Consuelo Jáuregui, expresó que de acuerdo con las cifras del Ministerio de Defensa, 245 personas han sido secuestradas este año.

“Claro que a esta cifra hay que contar los últimos secuestros de las Farc, en Arauca y en el Chocó y entonces estaríamos hablando de 250 personas. Es decir, el general Rubén Darío Alzate, el cabo primero Jorge Rodríguez, la abogada Gloria Urrego y los soldados profesionales César Rivera y Jonathan Díaz”, expresó Jáuregui. 

Denunció que las Farc continúan ejecutando secuestros extorsivos en el país y por esta razón registran 14 casos de plagios extorsivos y los demás casos son considerados como simples, por cuanto no hay una exigencia económica, como es el caso de los cuatro militares y la profesional del Derecho en poder de ese grupo armado al margen de la ley en los departamentos de Arauca y Chocó.

“La Fundación cuenta con la información oficial del Ministerio de Defensa y con las publicaciones de los medios de comunicación. Claro está que estas cifras siempre están en proceso de consolidación y pueden registrar variaciones”, señaló.

Expresó que “es cierto que muchos de los secuestros extorsivos no son denunciados ante las autoridades, pues los familiares temen que su ser querido en poder de una red criminal sufra las consecuencias e incluso que sea asesinado. Por esta razón muchas de las víctimas deciden negociar directamente con los secuestradores y no denunciar estos hechos”.

Precisó que “el secuestro sigue igual y se mantiene con ligeras fluctuaciones en los últimos tres años”.

“Creo que la reducción del secuestro en los últimos años obedece al trabajo que adelantan los Grupos Gaula de las Fuerzas Militares y de la Policía que cuentan con excelentes investigadores, tecnología de punta y por supuesto la vasta experiencia adquirida para perseguir a los secuestradores en el país. También las duras penas contra los delincuentes han servido para que se reduzca el secuestro en el país”, acotó.

Jáuregui denuncio que en Colombia las redes criminales dedicadas a la extorsión ejecutan secuestros simples para presionar el pago de sus exigencias.

“Realmente es un secuestro simple, pero es ejecutado para el pago de extorsiones”, aclaró Jáuregui.

“Es cierto que está pasando un fenómeno, especialmente, con los delincuentes comunes que hacen secuestros simples, pero tienen como fin el pago de extorsiones. Este fenómeno figura como secuestro simple, porque no aparece por ninguna parte una exigencia económica, pero en muchas ocasiones es una forma de presionar a los comerciantes, a los ganaderos, a los agricultores, a las empresas y a las entidades, entre otras, para presionar el pago de extorsiones”, dijo.

Insistió en que “vemos que el secuestro se ha reducido y se incrementó la extorsión. La razón del incremento de la extorsión está relacionada con la facilidad de intimidar a una persona, pues con un simple teléfono celular, las bases de datos con la información de las personas blanco de su accionar criminal, es suficiente para ejecutar una acción criminal. Y, el secuestro requiere una estructura mucho más elaborada que exige contar con recursos para mantener cautiva a una víctima. Sin embargo, los secuestradores le temen a los Gaula por la experiencia adquirida y sus operaciones exitosas. Pero para los delincuentes es mucho más rentable la extorsión”.

Reveló que los departamentos marcados con el fenómeno del plagio son: Arauca, donde se registran casos de secuestros tanto de las Farc como del Eln y de la delincuencia común; en Norte de Santander, Cesar, La Guajira, el Huila, Nariño, Cauca y el Meta, entre otros.

La Directora Ejecutiva de la Fundación País Libre señaló que “en el departamento del Meta se redujo el secuestro en forma significativa, pero se incrementó la extorsión”. 

“En materia de extorsiones a nivel nacional, el año pasado fueron denunciados 4.805 casos y este año la cifra es muy baja con 2.732 denuncias. Creemos que lo que está pasando es que las personas objeto de acción criminal no denuncian. Lo que nosotros analizamos es que esa cifra representa solo un 10 por ciento de las extorsiones que se registran en el país”.

Agregó que los autores de las extorsiones en el territorio nacional son la delincuencia común, como uno de los actores más representativos, seguido por las bandas criminales al servicio del narcotráfico y las guerrillas de las Farc y del Eln.