Más de 25.000 personas que han sido afectadas por la guerra en el país, se verán beneficiadas con planes de empleo tanto a nivel rural como urbano. La ministra de Trabajo, Clara López Obregón, presentó los avances del Programa Rutas de Empleo Rural y Urbano para Víctimas de Conflicto Armado -Priev-, gestión que empezó en 2013.

Las tres líneas de acción en las que está enfocado el trabajo a favor de las víctimas están relacionadas con formación, emprendimientos y reparación colectiva, componentes desarrollados tanto a nivel urbano como rural. A esto se suma un eje dispuesto para la prevención de la trata de personas y la explotación sexual de mujeres, niñas y niños víctimas de conflicto armado.

Según López Obregón, “la guerra en nuestro país ha dejado más de siete millones de víctimas, afectó especialmente a campesinos, afrodescendientes, indígenas, sindicalistas; desestructuró las relaciones laborales, personas que en algún momento tuvieron un trabajo estable, el conflicto los confinó al desamparo. A toda esa población es que queremos llegar, buscamos que las víctimas recuperen esos derechos que les fueron arrebatados a la fuerza”.

MinTrabajo dijo que en el momento, en diferentes regiones del país, se les pregunta a las víctimas qué tipo de capacitación desean tener, cuáles son sus prioridades, de qué manera es posible adelantar proyectos que contribuyan a la generación de sus ingresos, reconociendo su diversidad territorial, étnica, sexual, cultural, y sus capacidades físicas y mentales, pues hay que recordar que el conflicto dejó incluso a muchas personas en condición de discapacidad.

La inversión dispuesta para esta estrategia que busca restituir las capacidades laborales de quienes han vivido el horror de la guerra, con el fin de lograr su estabilización socio-económica, y por lo tanto la recuperación de sus proyectos de vida, es de 33.000 millones de pesos para 2016 y 34.320 millones para 2017.

Al frente de esta actividad está el Grupo Interno de MinTrabajo para la Reparación Integral de Víctimas del Conflicto Armado (Gitriv), a cargo de Gloria Cuartas Montoya, quien explica que los diferentes componentes incluyen ejercicios que pasan por el conocimiento, análisis y comprensión de las memorias, las prácticas económicas en los territorios y sus contextos, con acompañamiento psicosocial, en programas que contribuyan al restablecimiento de sus derechos relacionados con la generación de ingresos y acceso a empleo.

En esta tarea de apoyo a las víctimas, la cartera laboral trabaja en articulación con algunas de sus entidades adscritas como el SENA y el Servicio Público de Empleo; las cajas de compensación familiar; y, de igual forma, varios aliados que cumplen un papel clave, tales como la Organización Internacional del Trabajo (OIT), el PNUD, la Organización Iberoamericana de Seguridad Social (OISS), el Centro de Innovación para la Industria y la Moda (CIIM), Usaid / ACDI-VOCA y la OEI (Organización de Estados Iberoamericanos).

La ruta de empleabilidad para las víctimas en temas de generación de ingresos y empleo está conformada por los siguientes pasos:

Una vez la persona ha hecho la declaración de los hechos victimizantes, entra al Registro Único de Víctimas de la Unidad para la Atención y Reparación de Víctimas.

Pasa al acceso de la oferta institucional en fase de ayuda humanitaria, en relación a temas de salud, educación, vivienda y seguridad alimentaria.

MinTrabajo entra a fortalecer la formación laboral con entidades debidamente certificadas o acompañamiento y apoyo a emprendimientos, en el marco de una reparación integral que busca una estabilización socioeconómica.

Inscripción en el Servicio Público de Empleo, de MinTrabajo, donde las hojas de vida de las víctimas tienen prioridad.