Empleo, la obsesión del PP español | El Nuevo Siglo
Lunes, 31 de Octubre de 2011

Una batalla por el empleo y por  el control del déficit público inició el líder de la derecha española, Mariano Rajoy, al presentar su programa para las legislativas del 20 de noviembre.

"Nuestro principal objetivo, nuestra obsesión es el empleo, no existe mayor prioridad en un país con cinco millones de parados con casi un millón de jóvenes buscando trabajo, y con un 1,5 millones de hogares en los cuales todos los miembros están en paro", dijo Rajoy en un discurso en Santiago de Compostela (Galicia, noroeste de España).
Otra gran prioridad de este programa desvelado el domingo: "cuentas públicas en orden", subrayó el líder del Partido Popular (PP) y probable jefe del próximo gobierno, cuando los sondeos parecen concederle la mayoría absoluta frente a los socialistas, en el poder desde 2004.
Confirmó que el PP, si gana las elecciones, aprobará una ley orgánica de estabilidad presupuestaria para desarrollar la "regla de oro", incluida en septiembre en la Constitución española para limitar el déficit público.
Tras ascender hasta el 11,1% del PIB en 2009, España redujo su déficit público al 9,3% en 2010 y ahora el gobierno espera acabar 2011 con un 6% para reducirlo al 4,4% en 2012.
Mientras España cuenta con una tasa de paro del 21,52% acercándose a los cinco millones de desempleados, la batalla por el empleo estará en el centro de la campaña electoral, que se abre oficialmente el viernes, ya que los socialistas también han hecho de este tema una prioridad.
"Cuando el empleo se destruye, todo el país se resiente. Debemos concentrar todos los empleos en la creación de empleos, es el hilo conductor de nuestro plan global frente a la crisis", añadió Rajoy.
Obligado por las implicaciones de la crisis, el programa electoral del PP enumera pocas proposiciones concretas.
Asegurando que la reactivación del empleo pasará por la ayuda a las pequeñas empresas y los emprendedores, anuncia medidas como la modificación del pago del IVA y del impuesto de sociedades, así como ayudas fiscales por el primer empleado./AFP