Al menos 35 emigrantes nigerinos que se dirigían a Argelia murieron de sed en el desierto de Níger después de que el vehículo que los transportaba tuviera un desperfecto técnico, anunciaron el lunes a la AFP las autoridades locales.
"Varios viajeros nos informaron haber visto y contado hasta 35 cadáveres, en su mayoría mujeres y niños, en la carretera" declaró a la AFP Abdurramán Mauli, alcalde de Arlit, localidad minera al norte de Níger.
"Unos cuarenta nigerinos (...) que intentaban emigrar hacia Argelia murieron de sed a mediados de octubre" confirmó Rhissa Feltu, alcalde de Agadez, también en el norte del país.
Cinco cadáveres -dos mujeres y tres adolescentes- ya fueron encontrados por el ejército, indicó a la AFP un gendarme nigerino.
Los demás cuerpos todavía no fueron hallados.
Por otra parte, 19 supervivientes fueron llevados a Arlit (norte), según ese gendarme, que no dio más detalles.
Según Feltu, dos vehículos que llevaban "al menos a 60" emigrantes dejaron Arlit "hacia el 15 de octubre" con destino a Tamanrasset, ciudad al sur de Argelia, en pleno desierto del Sahara.
Fuentes informadas aseguran que es bastante habitual que los traficantes abandonen a los emigrantes en medio del desierto, condenándolos a una muerte segura.