El representante Barguil así lo plantea, mientras se tramita una ley que permita al Gobierno intervenir en casos que afecten gravemente a todo el país.
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Si el paro de los pilotos de Avianca sigue afectando gravemente otros sectores de la economía, el Gobierno podría acudir a la emergencia económica, consideró el representante por Córdoba, David Barguil, del Partido Conservador.
Este miércoles, la Asociación del Transporte Aéreo en Colombia (Atac), a través de una carta dirigida al presidente Juan Manuel Santos, pidieron convocar al tribunal de arbitramento para amortiguar la crisis que se vive por la huelga de pilotos de Avianca, que completa una semana.
"Sorprende la ausencia de un pronunciamiento claro y contundente de las autoridades frente a una huelga por definición ilegal dado el marco normativo colombiano ante el cual no hay lugar para interpretaciones", dice la carta dirigida al Mandatario.
Como es de público conocimiento, unos 700 pilotos de Avianca agremiados en la Asociación Colombiana de Aviadores Civiles (Acdac) adelantan desde hace una semana un cese de actividades que, según datos de la aerolínea, ha afectado a más 162.000 pasajeros por la cancelación de 1.690 vuelos nacionales e internacionales, equivalentes al 49 por ciento de los itinerarios programados.
La huelga podría extenderse hasta 60 días, según el sindicato, que reclama mejoras económicas y de seguridad aérea.
“El Gobierno podría incluso estudiar la alternativa de una declaratoria de emergencia económica y bajo esa figura puede expedir unos decretos con fuerza de ley en esa materia, que ayuden a solventar la crisis de manera inmediata”, sostuvo.
La compañía, que suspendió la venta de tiquetes hasta el 5 de octubre como medida preventiva, ha indicado que tiene pérdidas de 2,5 millones de dólares diarios debido a huelga.
En diálogo con EL NUEVO SIGLO, el congresista planteó que se requiere intervención del Gobierno para, por ejemplo, congelar el precio de los tiquetes aéreos, valores que se han disparado para especular con la necesidad de los pasajeros ante el paro en Avianca.
“Medidas como la siguiente: que el Gobierno tenga la facultad para congelar las tarifas de los tiquetes. En los tiquetes aéreos hemos visto la especulación que se ha hecho. Los tiquetes se han cuadruplicado de precio. Y eso no ha sido por oferta y demanda; eso ha sido por un aprovechamiento inescrupuloso del paro y de la crisis”, precisó.
Sin embargo, Barguil propone tramitar una ley para que exista un marco legal que permita hacer ese tipo de intervenciones sin necesidad de acudir a la emergencia económica.
“Pongamos sobre la mesa el análisis de una norma que existe en Chile, que ha usado Michelle Bachelet, óigame bien, ¡en 49 oportunidades! Michelle Bachelet, que es una presidente de izquierda”, expresó.
De acuerdo a lo expuesto por Barguil, “esa es la Ley de Seguridad Interna que plantea que en casos muy particulares, en sectores estratégicos, en cierto tipo de actividades que sean estratégicas para el país y que generen impactos sobre toda la población se puedan tomar medidas para controlarlos, medidas que pueden ser, por ejemplo, de tipo económico”.
La propuesta, indicó el legislador, es dotar al Gobierno de “herramientas concretas que permitan poner por encima el interés general, el interés de los ciudadanos por encima de los intereses particulares de estos pilotos, en este caso”.
Como lo ha venido publicando este Diario, Avianca instauró ante el Tribunal Superior del Distrito Judicial de Bogotá una acción para que se declare ilegal el paro de pilotos.
Si el paro se declara ilegal, la compañía podría despedir a los 700 pilotos afiliados a Acdac, que representan poco más de la mitad (exactamente el 50,43 por ciento) de los 1.388 aviadores con que cuenta la línea aérea en Colombia.
El miércoles, en medio de versiones contradictorias, las partes se levantaron de la mesa acusándose mutuamente de torpedear las negociaciones
"Avianca no puede más", dijo a radios locales el presidente de la aerolínea Germán Efromovich. "Los pilotos que están en paro no quieren negociar (...) ahora quién va a decidir esto es la justicia".
"Lamentamos que la administración haya dejado (...) a los pilotos sentados en la mesa", dijo por su parte Jaime Hernández, presidente de Acdac, que se mostró dispuesto a mantener las negociaciones auspiciadas por el Gobierno.
Avianca, que controla 60 por ciento del mercado interno, ha insistido en que la huelga es ilegal porque a su juicio contraviene la normativa colombiana que impide paralizar un "servicio público esencial", y no cuenta con el respaldo de la mitad más uno de los 8.500 trabajadores de la empresa.
"Después de ocho días de conversaciones adicionales en el Ministerio de Trabajo (...) Acdac no aceptó en el plazo establecido, la oferta definitiva presentada por Avianca", que venció a la medianoche del martes, señaló la empresa en un comunicado.
Acdac alegó en otro comunicado que varios de los preacuerdos alcanzados fueron modificados y debía llevar la propuesta a una asamblea antes de poder pronunciarse.
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