El Eln se declaró dispuesto a liberar "lo antes posible", aunque con condiciones, a los dos soldados secuestrados tras un ataque de esa guerrilla que dejó 12 muertos de las fuerzas armadas el pasado 26 de octubre, a una patrulla del Ejército de alta montaña de Los Pinos, en zona rural del municipio de Guicán, al norte de Boyacá.
En un comunicado, el Eln, segunda guerrilla del país, ratificó "la voluntad de liberar los soldados prisioneros de guerra lo antes posible, pero esto no depende sólo de la voluntad del ELN, depende (de) que el gobierno permita que los soldados regresen con vida, que garantice la seguridad y las condiciones de entrega a una Comisión Humanitaria, sin presencia ni amenaza de la fuerza pública".
“Ratificamos que los soldados profesionales Andrés Felipe Pérez del Valle y Kleider Antonio Rodríguez de Casanare están sanos y salvos bajo la custodia del ELN, y nos esforzamos por protegerlos, a pesar de los fuertes operativos militares. Nuestro accionar no atenta ni se contradice con los anhelos de paz y lo que hemos planteado al presidente Santos es la necesidad de pactar el cese bilateral al fuego, pero la repuesta ha sido negativa” dijo la guerrilla.
El Eln, que se atribuyó el ataque, enfatizó en el comunicado que éste está dentro del "accionar militar legítimo y no viola los Derechos Humanos porque no se ataca a civiles, se atacó a una patrulla militar de soldados armados y en campaña".
El Eln, con unos 2.500 combatientes según cifras oficiales, que surgió en 1964 a inspiración de la Revolución cubana, es la segunda guerrilla del país, después de las Farc con el que el gobierno adelante un proceso de paz desde hace tres años en Cuba.
Los acercamientos al Eln aún no han permitido definir una agenda formal de conversaciones de paz.