La disposición de que dos meses antes de los comicios esté depurado el censo electoral, según la Reforma Política, se podrá cumplir por primera vez para las elecciones legislativas y presidenciales de 2014, por la adopción de la inscripción automatizada de ciudadanos, la cual arranca el próximo 8 de abril por parte de la Registraduría.
Igualmente por la implementación de esta tecnología, la inscripción para votar, en caso de que se cambie de lugar de residencia o de domicilio, podrá ser cerrada dos meses antes de la respectiva jornada electoral, como también lo establece la Reforma Política.
Así lo anticipó ayer el registrador Nacional del Estado Civil, Carlos Ariel Sánchez, durante la reunión de la Comisión Asesora para la implementación del voto electrónico.
“Una vez hecha la inscripción de ciudadanos electrónicamente se podrá cumplir de manera eficiente lo que dice la Reforma Política, que sea dos meses desde el cierre de las inscripciones a las elecciones. Normalmente la Registraduría contaba con mínimo cuatro meses desde el cierre del censo electoral, más un mes que tenían las personas para hacer las reclamaciones”.
Incluso, dijo el funcionario, ya no será necesario reservar un mes para las reclamaciones porque se harán simultáneamente c0n la etapa del cierre de inscripciones, y en la medida en que se cubrirá prácticamente, salvo las veredas y corregimientos, todo el país en las últimas tres semanas y en las registradurías con estas bases, es decir, se cubrirá electrónicamente, se podrá on line y se podrá al día actualizar el censo, y las personas podrán incluso consultar las modificaciones que se hagan al censo por lo menos día a día. Un día se hacen las modificaciones y al día siguiente podrán ser consultadas.
La Ley 1475 (reglamentaria de la Reforma Política de 2009) establece la depuración permanente del censo electoral. En este sentido señala que “los principios de publicidad y de eficacia del censo electoral exigen que la organización electoral cuente con la debida anticipación, con datos ciertos y actuales para el desarrollo de los comicios y de los mecanismos de participación ciudadana”.
En todo caso, señala la norma, “el censo electoral deberá estar depurado dos meses antes de la celebración de cada certamen electoral o mecanismo de participación ciudadana”.
En consecuencia, el censo electoral depurado como el cierre de la inscripción de cédulas debe estar listo en enero de 2014, para el caso de las elecciones presidenciales, y en marzo del mismo año, en lo que corresponde a las presidenciales.
Las máquinas
El registrador Sánchez dijo que “la automatización electoral evita la suplantación de ciudadanos, el tráfico de votos y la inscripción de cédulas de personas muertas”:
Explicó que el modelo automatizado de inscripción de cédulas incluye el cotejo dactilar de los ciudadanos a través de un lector de huellas y la confrontación de esta información con el código de barras encriptado de la cédula amarilla con hologramas. Este proceso podrá hacerse en todas las registradurías del país y permitirá cotejar la huella de quien se inscribe con los datos que del ciudadano reposan en el Archivo Nacional de Identificación ANI.
1.300 máquinas como éstas serán ubicadas en las registradurías del país del 8 de abril hasta el 9 de enero. Del 16 hasta el 22 de diciembre se ubicarán 2.600 máquinas más en puestos de votación.
El 9 de marzo, cuando inicia el proceso de inscripción de cédulas, la Registraduría adelantará esta labor de forma manual y en papel, como ha sido costumbre en Colombia, sin embargo, desde el 8 de abril se instalarán 1.300 máquinas en las registradurías del país hasta el 9 de enero de 2014 para que los ciudadanos con la asistencia de funcionarios de la entidad realicen la inscripción electrónica. Además, del 16 hasta el 22 de diciembre de este año se ubicarán 2.600 máquinas adicionales en los puestos de votación.
El Registrador Nacional señaló que tuvo que cancelarse el proyecto inicial de ubicar máquinas como la exhibida hoy en centros comerciales, parques y otros puntos de gran afluencia de gente para facilitar la inscripción de cédulas, porque se solicitaron $56.418 millones al Gobierno Nacional y sólo se asignaron $30.000 millones.