El narcotráfico entra a nueva época sin capos | El Nuevo Siglo
Viernes, 21 de Septiembre de 2012

Con la captura en Venezuela de Daniel 'El Loco' Barrera, Colombia da por concluida la época de los grandes señores de la droga y se prepara para combatir a unas organizaciones narcotraficantes más atomizadas que nunca.

 

"El Loco' Barrera era el último capo de su categoría, de los que tenía un control importante sobre una zona importante del país", dijo a la AFP Christian Voelkel, analista en Colombia de la ONG Internacional Crisis Group.

La caída de Barrera, que anticipa una disputa entre narcotraficantes por sus rutas de exportación de cocaína a través de Venezuela, era uno de los objetivos más buscado por las fuerzas de seguridad colombianas.

 

En este momento "es difícil que un capo de la magnitud de Barrera vuelva a ser visto" en Colombia, se felicitó el ministro de Defensa, Juan Carlos Pinzón.

En su cruenta lucha contra el narcotráfico de las últimas dos décadas, Colombia logró desarticular primero a los hegemónicos cárteles de Medellín, de Pablo Escobar, y de Cali, de los hermanos Rodríguez Orejuela, y capturar después a sus principales herederos.

 

A Daniel Barrera se le consideraba el último de los grandes narcotraficantes de esa generación que quedaba en libertad -era probablemente el más buscado de América del Sur- pero su poder estaba lejos del que han adquirido líderes de cárteles mexicanos como Joaquín 'El Chapo' Guzmán.

 

Para el investigador Ariel Ávila, los narcotraficantes mexicanos podrían ahora intentar controlar la salida de droga colombiana desde Venezuela aprovechando la ausencia de Barrera, uno de los pioneros en utilizar esa ruta para exportar a los mercados de Estados Unidos y Europa, con escalas en Centroamérica y África.

 

En Venezuela ya habían caído destacadas 'fichas' del narcotráfico colombiano en los últimos años, como alias 'Valenciano' (de la banda criminal Los Paisas) y 'Diego Rastrojo'.

 

"Estos meses viviremos una disputa por esa ruta. Hay varios grupos que pueden luchar por el control. Los mexicanos pueden enviar comisionistas pero también la pueden pelear (la banda colombiana) Los Urabeños o algún mando medio de Barrera", señaló a la AFP Ávila, compilador del libro 'La frontera caliente entre Colombia y Venezuela' (2012).

 

'El Loco' Barrera no solía involucrarse en ese tipo de enfrentamientos porque, a diferencia de sus antecesores, no necesitó de un amenazador aparato armado para imponerse desde su feudo de los Llanos Orientales.

 

La protección de sus laboratorios y rutas la confiaba a una facción aliada del Erpac, un grupo criminal recientemente dividido y que, al igual que Los Urabeños y Los Rastrojos, proviene de la desmovilización de los paramilitares.

 

Pero la mejor arma de Barrera era su especial habilidad para corromper autoridades de Colombia y Venezuela y establecer alianzas con otros grupos armados como la guerrilla Farc.

 

La guerrilla comunista, actualmente en un diálogo de paz con el gobierno, proporcionaba a Barrera grandes cantidades de hoja de coca -la materia prima de la cocaína- cosechadas en territorios bajo su influencia, describió Voelkel.

 

Con Barrera fuera de juego, no está claro si los ascendentes Los Urabeños, Los Rastrojos u otro grupo posean en el corto plazo la infraestructura para asumir la producción de cocaína en el sur del país y los contactos para enviarla al exterior, señaló un análisis de la corporación especializada Nuevo Arco Iris.

 

Lo que no faltarán son candidatos a apropiarse de un mayor porcentaje de este lucrativo negocio en Colombia, donde se ha logrado reducir casi a la mitad su producción de cocaína en los últimos ocho años pero aún así se mantienen los niveles más altos del mundo, con un estimado de 345 toneladas el año pasado según la ONU.

 

Sin embargo, Voelkel piensa que difícilmente habrá "un solo sucesor" de Barrera, y que lo más probable es que su estructura narcotraficante se atomice. "Pero el problema sigue y no es necesariamente más fácil combatir un negocio fragmentado que uno unificado", dijo.