El mundo espera "buenas noticias de Grecia y no noticias exóticas o populistas", declaró en Cannes el presidente ruso Dmitri Medvedev.
Medvedev aludía a la incertidumbre en que se encuentra la Eurozona tras el sorpresivo anuncio de un referéndum en Grecia sobre el plan europeo de ayuda a ese país.
"Todo el mundo espera, por supuesto, buenas noticias de Grecia, buenas y no noticias exóticas y populistas", dijo el mandatario en un discurso pronunciado ante empresarios de los países del G20.
"Espero que no tengamos que esperarlas demasiado tiempo", agregó.
El presidente ruso estimó que los países europeos no avanzan lo bastante rápidamente en las medidas para luchar contra la crisis de la deuda y contra sus déficits presupuestarios.
"No quisiera herir a nadie, pero mi impresión es que las acciones de nuestros asociados tendrían que ser mucho más dinámicas y mucho más firmes para permitir restaurar el orden", dijo.
Medvedev recordó que Rusia participará en "programas de ayuda financiera a los países de la Unión Europea, al menos a través del FMI".
Calificó la situación en la Eurozona de "problema más agudo actualmente", pero estimó paralelamente que "ninguna ayuda exterior puede ser determinante para la Eurozona". "Europa debe ayudarse a sí misma", dijo.
AFP