El elíxir de amor, una ópera con destellos de sentimientos y lucha | El Nuevo Siglo
Foto cortesía MET
Miércoles, 13 de Julio de 2016

El ciclo de Verano 2016 de la Met-Opera de Nueva York presenta El elíxir de amor, una de las óperas más populares del repertorio lírico, que los amantes de las historias románticas de Bogotá, Cali, Medellín, Bucaramanga, Barranquilla, Cartagena y ahora Villavicencio e Ibagué podrán apreciar el 30 de este mes en las salas de Cinecolombia.

 

Anna Netrebko como la bella y rica Adina encabeza el reparto de esta súper producción de Barlett Sher, de la encantadora comedia de Donizetti, que se estrenó para la inauguración de la temporada 2012-13 de la Met. El tenor Matthew Polenzani es Nemorino, el humilde e ingenuo campesino enamorado de Adina cuyo corazón cree conquistar gracias a la ayuda de una supuesta poción mágica que le vende el charlatán Dulcamara, interpretado por Ambrogio Maestri. Mariusz Kwiecien es el fanfarrón sargento Belcore y Maurizio Benini el director musical de toda esta propuesta.

 

Esta divertida obra maestra de Gaetano Donizetti, basada en los libretos de Felice Romani, ha sido cantada por grandes como Pavarotti, Plácido Domingo, Carreras, Schipa, Florez y aquí por Matthew Polenzani quien hará suspirar con su interpretación del aria Una furtiva lágrima. Es también conocida como ‘la ópera que le dio voz al pueblo’.

 

Fue compuesta por Donizetti en solo dos semanas, creada por encargo del Teatro Canobbiana de Milán, donde se estrenó en 1832, y está basada en el libreto de Le Philtre de Eugéne Scribe. A pesar de tan corto tiempo logró un éxito arrollador que la mantuvo 32 días seguidos en cartelera. Poco a poco fue llegando a otros países y teatros, entre ellos la Metropolitan Opera de Nueva York, donde se estrenó en enero de 1904 con el legendario Caruso cantando a Nemorino. Hoy hace parte del grupo de óperas más representadas a nivel mundial y junto a El barbero de Sevilla y Las bodas de Fígaro es una de las joyas de ópera cómica. Su éxito se basa en mantener un carácter bucólico con personajes inspirados en la comedia del arte, todos entrañables, humanos y dotados de ternura y picardía.

 

En el año 2012, la Met-Opera sorprendió a su público al inaugurar su temporada anual con El elíxir de amor en un montaje del director estadounidense Bartlett Sher. En este se evocan los viñedos, los campos de trigo y las plazas de una ciudad rural en la escenografía de Michael Yeargan, inspirada en la obra del diseñador británico Oliver Messel; la iluminación de Jennifer Tipton evoca al sol italiano y los vestuarios rústicos y sencillos diseñados por Catherine Zuber, logran pulir todo el cuadro que nos traslada a los comienzos del siglo XIX durante el Resurgimiento o la independencia italiana.

 

Es en esta atmósfera donde Adina, la fría terrateniente interpretada aquí por la carismática soprano rusa Anna Netrebko, se mueve como una auténtica prima donna con un sombrero de copa. Si a esto se le suma el anuncio del compromiso de Adina con el Sargento Belcore, la situación hace dudar al humilde Nemorino de la posibilidad de que ella siquiera pueda fijarse en él.

 

Esta inseguridad es aprovechada por el inescrupuloso Dr Dulcamara, actuado por el barítono italiano Ambrogio Maestri, quien ofrece a Nemorino una supuesta poción mágica que puede desde quitar la calvicie hasta conquistar a cualquier mujer. La noticia de una herencia que pronto recibirá Nemorino hace que las casaderas del pueblo lo rodeen para seducirlo, hecho que despierta los celos en Adina y la confianza de él en el ‘elíxir’, logrando que triunfe el amor. Una historia romántica con trazos de humor.