Emmanuel Macron y Angela Merkel copresiden en París un consejo de ministros franco-alemán, para fortalecer su alianza y abordar, entre otros temas, las reformas de la zona euro necesarias tras el Brexit.
Macron, quien fue electo el pasado 7 de mayo como presidente de Francia, aspira a una refundación histórica de la Unión Europea, con una integración mayor en los ámbitos de defensa, seguridad e inmigración.
La visita de la canciller alemana Angela Merkel, que está acompañada por media docena de ministros, es un paso adelante hacia la creación de lo que Macron espera sea una hoja de ruta común para el bloque comunitario, que se prepara a un futuro sin el Reino Unido.
Alemania "debe moverse, como Francia debe moverse" reformándose, dijo Macron en una entrevista publicada el jueves en el diario regional Ouest Francia y en periódicos del grupo alemán Funke.
"Francia debe reformar su economía para darle más vigor", pero Alemania, de su parte, "debe acompañar una reactivación de la inversión pública y privada en Europa" y asumir sus "responsabilidades compartidas", agregó en la entrevista.
El presidente francés expresó no obstante algunas críticas sobre su vecino.
"Quiero que haya más coherencia en la zona euro, más convergencia (...) Los que estaban ya endeudados se encontraron aún más endeudados, ahora están más endeudados. Los que eran competitivos se volvieron aún más competitivos. Hay ganadores: Alemania forma parte de quienes supieron realizar reformas", pero Berlín "se beneficia de los disfuncionamientos de la zona euro".
Esta situación "no es sana", sentenció el joven centrista de 39 años.
- Merkel por la mañana, Trump por la tarde -
El consejo del jueves, el primero desde la llegada al poder de Macron, tendrá una agenda cargada: defensa europea, lucha antiterrorista, Alianza para el Sahel y armonización fiscal y social dentro de la UE.
"Nuestro objetivo es avanzar sobre algunos grandes temas bilaterales que hemos escogido y grandes temas europeos", dijo a la prensa un funcionario de la presidencia francesa esta semana.
Pero, a tres meses de las elecciones legislativas en Alemania, será difícil para París y Berlín avanzar significativamente en temas claves, como la reforma de la zona euro que ambiciona Macron.
El presidente centrista proeuropeo aspira a una integración mayor, que pasaría por la creación de un ministerio de finanzas, un parlamento y un presupuesto propio a la eurozona. Para que esto sea posible, se necesitaría una modificación de los tratados.
Merkel parece estar dispuesta a hablar sobre esto con París pero por el momento prefiere mantenerse a distancia de estos temas impopulares entre la opinión pública alemana, mientras lleva a cabo su campaña electoral.
Se espera también que Macron pida a Merkel que contribuya en el financiamiento de la fuerza antiyihadista G5 Sahel (Mauritania, Chad, Mali, Níger y Burkina Faso), creada recientemente bajo el impulso de Francia, y para un fondo de ayuda al desarrollo bautizado "Alianza para el Sahel".
Sobre la defensa europea, París espera concretizar varios proyectos de cooperación.
Tras este consejo franco-alemán, Macron recibirá por la tarde al presidente estadounidense Donald Trump, quien el viernes lo acompañará durante el tradicional desfile militar del 14 de julio en la avenida de los Campos Elíseos.