Apenas arrancando el torneo, los tradicionales rivales bogotanos, Millonarios y Santa Fe, se verán las caras en un clásico que será una verdadera prueba de fuego y en un marco que pinta hostil para los rojos, porque El Campín estará vestido de azul.
Los dos elencos tuvieron un buen inicio en la Liga Águila y eso motivó a los aficionados a agotar la boletería, pero solo será permitido el ingreso de los seguidores celestes.
Los dirigidos por Miguel Ángel Russo han mostrado un juego totalmente diferente al que expusieron a comienzos de año, cuando era profundo pero vertiginoso, sin pausa en el mediocampo y de continuo acecho al arquero contrario.
Ahora, apoyado en el talento de Harold Mosquera y con movimientos sincronizados, con la ventaja que les da la continuidad del plantel y la mecanización de la idea futbolística que quiere desarrollar el técnico Russo, utiliza un juego más elaborado, aunque sin dejar de presionar en campo contrario.
El técnico argentino está demostrando que sin contar con figuras rutilantes logró armar un plantel competitivo, con aspiraciones y que dará mucho de qué hablar en la Liga Águila II.
El trabajo efectuado por Russo les permite a sus dirigidos manejar los tiempos, saber cuándo se debe acelerar, cuándo tener el balón, hacer pases cortos o largos, sin renunciar a buscar continuamente el arco rival y sin dar ventajas defensivas.
Ya frente a Medellín el pasado sábado lució con un equipo compacto, con un patrón de juego claro y, de no ser por el árbitro Luis Gallo, otro gallo hubiera cantado, o mejor, otro hubiera sido el resultado y no un 1-1 injusto.
Pero no fue solo ante el Poderoso que los azules lucieron como un elenco prometedor. No. También el jueves frente a Alianza Petrolera tuvieron una gran presentación y en poco tiempo resolvieron las acciones a su favor con un 2-0 que pudo ser mayor, de no ser por las opciones que se dilapidaron y porque ya en el segundo tiempo, pensando en el clásico de hoy a partir de las 5:15 de la tarde, se dedicaron a controlar las acciones.
En esta etapa de Millonarios hay jugadores destacados. El principal, Mosquera, pero no se le quedan atrás Henry Rojas, John Duque, el golero Nicolás Vikonis y Duvier Riascos, quien actuando más en punta, merodea continuamente el arco rival.
Las ausencias de Pedro Franco y Déiver Machado no se han sentido. Tampoco la de Andrés Cadavid, que podría regresar hoy tras recuperarse de la intervención en el tabique.
Sin embargo, pese a todo lo bueno que muestra Millonarios, el partido de hoy no será fácil, especialmente porque al frente estará un plantel cuyo fuerte es destruir el juego del contrario, es decir, se dedica a marcar, a quitar balones, hacerse fuerte en defensa y esperar el error del rival para capitalizarlo.
A Nacional, al que derrotó 1-0 el pasado domingo le cerró todas las posibilidades de ataque y cuando lo desgastó, salió a buscar la victoria.
Además es un cuadro que bien puede emplear cuatro en el fondo, o un tres, o pasar a un cinco para no permitir que le inquieten al golero Leandro Castellanos.
Pero ojo. Hay que tener cuidado con las excursiones de los laterales y las apariciones de Roa, Perlaza o Gordillo en ataque.
Lo único que todavía no encaja en Santa Fe es el hombre en punta porque Denis Stracqualursi, aunque se mueve por todo el frente de ataque, intenta colaborar con el mediocampo y ayuda en defensa, no es ese goleador que marque diferencia.
Sobresale en esta etapa con el técnico uruguayo Gregorio Pérez, el volante Juan Daniel Roa, quien tiene más libertad para irse al ataque y se complementa muy bien con el lateral, con el que siempre intentan aprovechar los espacios que ve el rival bien sea para tirar centros o buscar el remate a puerta.
En el juego aéreo los Cardenales volvieron a ser fuertes con Moya y Urrego o Tesillo, o con los tres cuando Pérez opta por ponerlos al tiempo.
Es seguro que Pérez tome medidas preventivas para el juego de hoy para tratar de evitar que los laterales azules vayan continuamente al ataque, para que Rojas, Domínguez y Duque estén ocupados en la marca y para que Mosquera no sea ese eje sobre el cual se mueve el elenco celeste.
Si bien es uno de esos partidos que ninguno quiere perder, se espera que los protagonistas rindan al máximo y que si el resultado es un empate, no sea porque se dedicaron a defenderse o a hacer ese trabajo táctico que es valioso pero que no encanta al aficionado.
Esta vez, a eso de que “clásico es clásico” se suma que los tradicionales rivales capitalinos han tenido un buen arranque de torneo y pintan para ser grandes protagonistas de la Liga.
Otros partidos programados para hoy son los de Huila-Cali (3:15 p.m.), Jaguares-Junior (a la misma hora) y Alianza Petrolera-Rionegro Águilas (7:30 p.m.).
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