La nueva información de la actividad económica mundial sugiere que el crecimiento promedio de nuestros socios comerciales para 2014 podría ser algo menor que lo estimado en el escenario central del informe trimestral pasado (2,5%), con lo que se están afectando las exportaciones nacionales. Ello, como consecuencia de la pérdida de dinamismo en la zona euro y por una desaceleración más acentuada en China y en algunos países de la región.

Por el contrario, en los Estados Unidos se ha observado un desempeño en su actividad económica algo mayor que lo estimado. De esta forma, es probable que en el segundo semestre la balanza comercial del país siga por el sendero negativo, al incrementarse también las compras externas.

El impulso originado en el comportamiento del sector minero-energético se ha moderado, al igual que la tendencia descendente de los términos de intercambio, a lo que se suma la debilidad del sector externo, particularmente de nuestros vecinos de la región.

Por otra parte, el precio de las materias primas y de los principales productos que coloca el país en otras naciones ha venido cayendo. El precio internacional del petróleo, al igual que las cotizaciones de algunos bienes básicos que importa Colombia descendieron. Cálculos preliminares indican que el deterioro en los términos de intercambio podría ser mayor que lo estimado en el informe trimestral pasado.

De acuerdo con las minutas de la Junta Directiva del Banco de la República, en julio el valor de las exportaciones en dólares se recuperó y se situó por encima del promedio registrado en el primer semestre del año.

La recuperación fue más acentuada en las ventas externas de bienes de origen minero y agrícola. En los primeros siete meses del año, el valor de las exportaciones totales en dólares acumuló una caída de 2,6% (en el primer semestre fue de -4,5%).

De otro lado, las importaciones en dólares se aceleraron y en julio registraron su mayor valor mensual histórico. El crecimiento anual más alto se dio en las destinadas a bienes de capital, principalmente por compras de aviones.

Las importaciones de bienes de consumo e intermedios también registraron crecimientos importantes. En lo acumulado entre enero y julio, las importaciones totales crecieron 8,1%, 2 puntos porcentuales más que lo registrado en el primer semestre del año. Con todo esto, no se espera que a corto plazo mejore el rumbo de la balanza comercial este año que sin duda será negativo.