El ejército sirio anunció que tomó el jueves el control total del barrio rebelde de Baba Amr, en Homs (centro), tras semanas de bombardeos y de dos días de combates con los rebeldes, quienes anunciaron una "retirada táctica".
Casi un año después de que estallara una revuelta que inicialmente era pacífica, la oposición, incapaz de derrocar al régimen con sus manifestaciones, anunció finalmente el jueves la creación de un "buró militar", reconociendo "la importancia de controlar la resistencia armada en Siria".
En Homs, "el ejército sirio controla la totalidad de Baba Amr, cayeron todos los últimos focos de resistencia", afirmó a la AFP una fuente de los servicios de seguridad en Damasco.
"Los rebeldes están todavía en los barrios de Hamadiyé y de Khaldiyé (noreste) y las operaciones van a seguir para desalojarlos", añadió la fuente.
Al mismo tiempo, el coronel Riad Asad, jefe del Ejército Sirio Libre (ESL), compuesto principalmente por desertores que abandonaron al régimen tras iniciarse la movilización opositora en marzo de 2011, anunció una retirada "táctica" de sus combatientes de Baba Amr, asediado y bombardeado desde hace 27 días por las fuerzas del presidente Bashar al Asad.
Según el opositor Observatorio Sirio de Derechos Humanos (OSDH), con sede en Londres, al menos 39 personas murieron el jueves en Siria: 17 civiles en los combates entre el ejército sirio y los combatientes del ESL en los alrededores de Baba Amr y otros cuatro por los disparos de francotiradores en otros barrios.
Además, al menos otros ocho soldados y siete desertores murieron en enfrentamientos el jueves en la provincia de Al Qunaitra (sudoeste), fronteriza con la meseta del Golán, conquistada y anexionada por Israel, añadió el OSDH. Otros dos civiles murieron en Hama (centro) y uno en Damasco.
El Consejo Nacional Sirio (CNS), principal coalición de la oposición, instó a la comunidad internacional a prevenir una posible "matanza" tras la toma por el ejército de Baba Amr.
Las autoridades, en cambio, aseguraron que los soldados están distribuyendo alimentación a la población que estaba bloqueada y evacuando a los heridos.
El Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR) y la Media Luna Roja Árabe Siria (CRAS) anunciaron que podrán entrar el viernes en Baba Amr "para enviar ayuda humanitaria y evacuar a los heridos".
En Qusseir, pequeña ciudad al sudoeste de Homs regularmente bombardeada por el ejército, comenzaba a faltar de todo y los combatientes rebeldes, esencialmente equipados con armas ligeras, apenas pueden hacer frente a la artillería pesada del ejército.
El CNS anunció que comenzará a distribuir nuevas armas entre los desertores a través del "buró militar" de inminente creación.
La idea de armar a la oposición, a la cual Estados Unidos se muestra reticente por temor a que Al Qaida aproveche la violencia, recibe cada vez más apoyo.
El Parlamento de Kuwait adoptó el jueves una resolución no vinculante para el gobierno llamando a armar a la oposición siria y a romper las relaciones diplomáticas con Damasco. El primer ministro de Catar, Hamed ben Jasem al Thani, que el lunes dijo ser favorable a las entregas de armas, afirmó el jueves que su país estaba dispuesto a estudiar "todas las opciones" para salvar al pueblo sirio.
Ante la violencia que ha costado a vida a más de 7.600 personas desde marzo de 2011 y la grave crisis humanitaria, el Consejo de Derechos Humanos de la ONU adoptó una resolución condenando una vez más las "violaciones cada vez más graves de los derechos humanos" en Siria.
Las autoridades sirias aseguraron estar dispuestas a negociar una visita de la responsable de operaciones humanitarias de la ONU, Valerie Amos. Rusia recomendó "con insistencia" a Damasco que se reúna con Amos como "gesto de buena voluntad".
El tiempo también apremia para los dos periodistas franceses, Edith Bouvier y William Daniels, probablemente bloqueados aún en Homs. Bouvier, que trabaja para el diario francés Le Figaro, fue gravemente herida el 22 de febrero en un bombardeo que costó la vida a la reportera norteamericana Marie Colvin y al fotógrafo francés Rémi Ochlik.
Por otro lado, el jefe de la iglesia greco-ortodoxa de Siria, Ignatius IV Hazim, se declaró opuesto a una intervención extranjera en el país por estimar que tendría repercusiones negativas "tanto para los cristianos como para los musulmanes".
Reino Unido anunció este jueves que retiró a todo su personal diplomático de Siria y suspendió el funcionamiento de su embajada "por razones de seguridad". Estados Unidos y Siria ya habían cerrado también sus respectivas embajadas.
AFP