Se cursaba el tiempo de adición en el partido contra Banfield la noche del pasado martes. Los naranjas ganaban 1-0 y estaban bailando a Boca Juniors en La Bombonera. En los últimos minutos del extratiempo Edwin Cardona envió un bombazo que rompió las redes de Mauricio Arboleda, quien no pudo hacer mucho para evitar el gol.
El golazo de media distancia de Cardona le permitió a su equipo llegar a la definición del encuentro por penales y ganar un partido amistoso contra Banfield.
Gracias al golazo de Cardona EL NUEVO SIGLO le muestra las razones por las cuales el colombiano está brillando en Buenos Aires.
La Bombonera es una casa para los colombianos:
La mejor época de Boca fue comandada por figuras locales como Mauricio “El Chicho” Serna, Jorge “El Patrón “Bermúdez y Óscar Córdoba. Desde ese entonces pasaron por La Bombonera Fredy Guarín, Fabián Vargas, Luis Amaranto Perea y otros. Con base en lo anterior se evidencia cómo Boca es un equipo en el cual los jugadores locales son tenidos en cuenta y el hecho de que Wilmar Barrios, Frank Fabra y Cardona sean titulares, crea un ambiente de confianza para los tres, pues logran jugar con mayor facilidad. Para el hincha del azul y oro es muy importante que sus jugadores tengan la categoría de esforzarse al máximo por la camiseta, no solo con goles sino con entrega. Los colombianos suelen ser bien recibidos en Buenos Aires gracias a que su dedicación marcó un hito en las páginas de Boca Juniors.
El Juego de Boca Juniors
Los de Guillermo Barros tienen un juego directo, en el cual no es necesario un amplio porcentaje de posesión de balón, lo que prima es la efectividad. Buscaron este esquema de juego porque no gozaban de un enganche neto, pues Pablo Pérez, Fernando Gago, Wilmar Barrios y Sebastián Pérez son volantes. A pesar de no contar con medio-campistas que aporten mayor capacidad ofensiva, en la plantilla del azul y oro están Darío Benedetto y Walter Bou, dos de los mejores delanteros de la Primera División. La llegada de Cardona le ayuda a Boca Juniors a recuperar la magia que tanto le caracterizó con un 10 de la talla de Juan Román Riquelme.
Boca solo tiene un enganche:
Una de las cosas que más le criticaban a Guillermo Barros es que su equipo conseguía los resultados pero no enamoraba con su estilo de juego. Era un plantel que sabía defenderse y que con dos opciones podía definir un resultado. Cuando Juan Román Riquelme llevaba la batuta del medio campo, Boca era una máquina de hacer goles, pues el último 10 no necesitaba mayor espacio para dejar cara a cara a Martín Palermo con el guardameta rival. El más reciente campeón del fútbol argentino no tenía un enganche claro la campaña anterior. Con Cardona se recupera de a poco la esencia de uno de los equipos más grandes de América. Muchos criticaron que las directivas le dieran la 10 de Riquelme al colombiano, pero ellos argumentaron que el jugador tiene el total respaldo del club y está en las condiciones de tener un número tan importante.
Aún queda mucho camino por recorrer para Cardona en su primer año como Xeneize, pero su debut promete y demuestra una de sus facultades como lo es el tiro a larga distancia. Boca no solo debe ganar la Liga Argentina otra vez, también debe tener como objetivo llevar a las vitrinas de La Bombonera la Copa Libertadores, que hace 10 años no se queda en su estadio.
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