Arrancó este mes el nuevo esquema para renovar o cambiar la licencia de conducción en Colombia. Tras los problemas que se presentaron semanas atrás, cuando fue evidente que decenas de miles de conductores dejaron para última hora esta diligencia, lo que llevó a que el sistema que se había dispuesto en las autoridades de tránsito a nivel local colapsara, el Ministerio de Transporte y las secretarías delinearon otro cronograma.
Ese nuevo modelo, que fue bautizado como “Pico y Pase”, está dirigido a que haya mayor agilidad en el trámite así como a simplificar el proceso de renovación de licencias de conducción, en un periodo que va desde febrero y hasta noviembre. Tanto el Ministerio como la Superintendencia de Puertos y Transporte, el RUNT y las secretarías de todo el país aseguraron que el sistema está probado para soportar una demanda de alto impacto.
En los primeros días las reacciones de la ciudadanía han sido positivas, aunque es claro que deben profundizarse las campañas pedagógicas para socializar en mayor proporción un método que se basa en que la renovación del pase se hace teniendo en cuenta el último dígito de la cédula y el número del mes. Así las cosas, este mes (el número dos del año) deberán acudir los conductores cuyas cédulas terminan en 2, en marzo quienes terminen en 3 y así sucesivamente hasta noviembre, que le corresponderá al número 1, en tanto que en octubre el turno es para los documentos terminados en cero. También es clave que se promocione más lo relativo a que las personas agenden sus citas por internet o consulten si deben o no realizar el trámite.
Muy oportuno resultó, de paso, el pronunciamiento el viernes pasado del Consejo de Estado que dirimió la controversia jurídica en torno a cuál trámite relacionado con el cambio o renovación de los pases debía pagarse y cuál no.
El máximo tribunal de lo contencioso-administrativo fue enfático en precisar que la renovación del pase tiene costo y debe ser asumida por quien aspira a tener una licencia vigente. En cambio, la sustitución del documento debe ser gratuita, aunque solamente aplica para aquellas personas que no tengan vencida su licencia de conducción.
Lo importante es que con el pasar de los días se evalúe el arranque del proceso y si es necesario tomar correctivos, que se implementen con prontitud. Por ejemplo, aún está por definir si las EPS pueden realizar los exámenes médicos a los conductores. Y también es clave que la ciudadanía entienda que este es el último plazo y quien no lo cumpla deberá atenerse a las respectivas sanciones. Este último mensaje debe ser imperativo.