La contaminación ambiental, el mal manejo de los recursos naturales, la tala de bosques y la invasión de extensas áreas de selva progresivamente han reducido el espacio vital de especies animales como los grandes felinos. No es de extrañar que suelan merodear en cercanías de poblados. Los mismos seres humanos han provocado estos desplazamientos.
No pocas especies están amenazadas. El calentamiento global que está causando fenómenos como deshielos afecta a los osos polares, y quizá llegue el día en que la sobrevivencia sea difícil para esta especie.
La fauna de ríos y mares tampoco está exenta de riesgos. Miles de elementos dañinos se vierten a los océanos y poco a poco estas inconmensurables reservas de agua van perdiendo su riqueza representada en corales, peces de múltiples clases, aun los gigantes como ballenas, tiburones, si no se toman medidas de protección.
Preservar los ecosistemas es tarea primordial a escala universal. Evitar que se acabe la fauna tanto terrestre como marina. En ambos mundos el abisal y el de la superficie terrestre habitan animales de todo tipo, que en realidad son como dijo alguien los ‘hermanos menores’, y compañeros en esta esfera verde azulada, como se observa desde el espacio, privilegio de astronautas y viajeros que han estado en órbita y pudieron admirar la majestuosidad del planeta Tierra.
Informe reciente del Fondo Mundial para la Naturaleza, sigla en inglés WWW, advierte el peligro de extinción de los tigres. Son pocos los que quedan libres. Y no solo estos hermosos animales; otros como el rinoceronte, y muchos más, su número se ha reducido y si no hay acciones prontas para salvarlos, en pocos años solo se podrán apreciar en fotografías y videos.
Prioridad preservar la fauna y evitar su deterioro. Es recurso invaluable del planeta su flora y fauna y vital fortalecerlas y proteger las especies amenazadas. Quizá en todo el universo sea éste el único lugar poblado no solo por humanos sino por distintas clases de animales, con ríos, quebradas, mares, selvas. Es imperativo la conservación de bosques y el hábitat de los animales. Este astro terrestre parece ser el único donde vibra la vida por doquier. Otros, como Marte, las imágenes transmitidas por las sondas que han llegado a su superficie lo muestran como un mundo yermo, árido, sin vegetación.