- Reactivación rápida pero cautelosa
- El billonario plan de reconstrucción
Los planes de reactivación tras la fase crítica de la pandemia del Covid-19 son, sin duda, el principal reto para las regiones que afortunadamente han declarado superada o controlada la emergencia. Primero fue Asia y ahora el turno es para en Europa, en tanto que en América el panorama es más disímil. Mientras que Estados Unidos (el país más golpeado por este coronavirus) y Canadá avanzan hacia una normalización gradual de sus actividades productivas y la “nueva normalidad” de sus sociedades, en América Latina y el Caribe se entró al pico de contagios y fallecimientos, sobre todo por la alta incidencia en Brasil.
El proceso de reactivación de la Unión Europea es visto, dada su complejidad multinacional y la forma distinta en que la pandemia golpeó a muchos de sus países, que incluso aplicaron estrategias muy diferentes para enfrentar la emergencia, como un ejemplo de lo que podría hacer el resto del mundo una vez pase el pico epidemiológico.
Sin duda, las últimas tres semanas han sido particularmente positivas para el viejo continente, a tal punto que se habla de un “nuevo amanecer”, aunque el virus sigue latente y generando contagios y fallecimientos a diario, pero en mucho menor escala. El optimismo es más marcado si se recuerda que hace apenas unas semanas el panorama en países como España, Italia, Francia o Reino Unido era crítico y los pronósticos catastróficos imperaban. Ahora, como se dijo, el porcentaje de casos nuevos de este coronavirus sigue a la baja, lo que resulta doblemente positivo no sólo porque evidencia que se frenó la crisis sanitaria sino porque descarta el temor a un rebrote masivo e inmediato una vez comenzaran a reactivarse gradualmente los países. Una muy buena noticia si se tiene en cuenta que los avances para lograr una vacuna o un tratamiento efectivos son prometedores pero se está a meses de consolidar una solución definitiva contra la pandemia.
España ya lleva tres semanas de desconfinamiento, incluso en Madrid y Barcelona, en donde la flexibilización de la cuarentena estricta demoró más que en el resto del país. Además del comercio, los restaurantes y terrazas, las actividades productivas e industriales toman ritmo rápidamente. Si bien hay un pulso político por el manejo dado por el gobierno socialista a la pandemia, la prioridad es el plan de reconstrucción nacional.
Italia, que también recibió un fuerte golpe por la crisis sanitaria, ya piensa en la reactivación gradual del turismo, lo que evidencia que su hoja de ruta de normalización avanza de forma acelerada. Se prevé que el 15 de junio cines, teatros y parques de atracciones reabran, en tanto el gobierno lanza billonarios salvavidas a las empresas, que prendieron motores.
En Francia, a su turno, gran parte de la industria, el comercio y el rubro de bienes, productos y servicios está reanudando labores, con los respectivos protocolos de bioseguridad. Restaurantes, cafés, bares, teatros y museos reabrieron y se puede circular libremente pero con tapabocas.
En Reino Unido la superación de la pandemia ha sido más lenta. De hecho ayer sobrepasó la barrera de los 40 mil decesos, en medio de un proceso gradual de desconfinamiento que, como era de esperarse, produjo una ligera aceleración en el índice de nuevos contagios. Sin embargo, el plan de reactivación mantiene los cronogramas fijados por el gobierno Johnson.
Otro dato clave es que Italia, España y Francia lideran la iniciativa para la pronta reapertura de fronteras aéreas y terrestres. Aunque la idea es que se pueda tomar una decisión en conjunto del bloque comunitario, ya algunos gobiernos procedieron cautelosamente en esa dirección. La fecha inicial planteada es el 15 de junio en el orden interno y julio para el resto del mundo.
No menos importante son las distintas propuestas para un plan de reconstrucción económica y productivo europeo, que demandaría no menos de 500 o 600 mil millones de euros.
Un hecho clave, que impacta mucho en la psicología social sobre la instauración de esa “nueva normalidad”, es el regreso del fútbol profesional. Alemania lo hizo hace dos semanas y España, Inglaterra e Italia tienen fijado para los próximos días sus primeros partidos. En el resto del continente también se hará lo propio antes de terminar junio. En la mayoría de los casos, eso sí, no se permitirá público en los estadios.
Como se dijo, el Covid-19 todavía sigue latente en Europa pero la mayoría de sus países, varios de los cuales incluso han declarado “controlada” o “superada” la pandemia, o lanzado las campanas al vuelo al registrar cero muertes en un día, están en plena reactivación. Aunque será un proceso largo, costoso y complejo, sin duda, el viejo continente vive “un nuevo amanecer” después de la terrible noche causada por la pandemia.