Conservatismo en Brasil | El Nuevo Siglo
Martes, 7 de Octubre de 2014

*Adelante el oficialismo

*Neves le respira a la espalda

 

La  campaña por la Presidencia de Brasil, la gigantesca potencia emergente de la región, cuya locomotora económica se ha venido desacelerando durante el mandato de la señora Dilma, estuvo marcada por un cierto cansancio del electorado que veía casi como inevitable su reelección puesto que la candidata socialista, por su condición de apasionada ecologista y lo novedoso de su ascenso político, apenas por un tiempo figuró adelante como eventual alternativa en las encuestas, pero a media que el electorado se familiarizó con su discurso y propuestas, se fue desencantando.  Lo que determinó que de nuevo subiera en las los sondeos la Presidenta. Al parecer, el mayor enemigo de Marina Silva, resultó ser ella misma, en cuanto se mostró vacilante y contradictoria en las políticas que habría de seguir, así como le faltó más contundencia en el discurso contra el continuismo. En tales circunstancias, como Aécio Neves, el candidato conservador aparecía rezagado en todas las encuestas y su partido había sufrido varios reveses en el pasado, los medios de comunicación lo menospreciaron y poca atención le prestaron  a sus propuestas. Siendo la explicación de Neves y sus agentes de campaña muy distinta, en cuanto en varias oportunidades denunció que las encuestas estaban siendo amañadas, por cuanto el oficialismo le temía a su candidatura y de manera deliberada inflaba a la candidata Silva, en tanto  sabían que era la más vulnerable.

Lo que sí ha trascendido es que los equipos de propaganda política del oficialismo guardaban un arsenal con la más poderosa artillería por si Neves pasaba a la segunda vuelta, pese a que los diarios y los expertos en futurología sostenían que de antemano estaba derrotado y no pintaba. Aserto que  corrobora la hipótesis de un  oficialismo que  tenía información de las inmensas posibilidades de captar el descontento y nuevos electores de Neves. Es noticia que la presidenta Rousseff, que sacó el 41,58% de los votos  salió de inmediato a combatir a su contendor, a sabiendas de que Neves con 33,56%., podría atraer una parte de los votos de Marina Silva, con  21,32% del total. Para impedir que Neves consiga penetrar en los sectores populares en donde el prestigio del Gobierno ha bajado y se han presentado duras protestas que han sido reprimidas por la fuerza, la Presidenta ha atacado duramente al partido de Neves que, en su opinión, cuando gobernó sólo lo hizo “para un tercio de la población, olvidando a los más necesitados”. Se trata de sembrar el terror entre los humildes con el cuento de que: “los gobiernos del PSDB quebraron a Brasil tres veces, provocaron el racionamiento de energía y pretendían convertir la universidad pública en un reducto elitista, al tiempo que ponían de rodillas al Brasil ante el Fondo Monetario Internacional y menospreciaban a los pensionados: que llamaban ‘vagabundos’ ahora prometen nuevas fórmulas  para la jubilación”.

Sin que consiga borrar que el PSDB, durante el gobierno de Fernando Henrique Cardoso, frena la caída libre de la economía de Brasil, le da un vuelco al país e implanta un  modelo tan positivo, que  Lula al asumir el poder desde la oposición sigue la ruta. Esa continuidad en lo económico le permitió cosechar grandes éxitos y favorecer a los sectores populares. Se intenta estigmatizar al exgobernador de Minas Gerais y exsenador Neves, criticando su propensión durante años a la vida social y a rodearse de bellas mujeres, de elegantes modelos y de casarse con una de ellas, con la que tiene un matrimonio estable y con hijos. Lo mismo que por el supuesto escándalo por la construcción de un aeropuerto en tierras de uno de sus tíos. Nada de lo cual ha conseguido mermar su prestigio de habilísimo político que suele crecerse en las dificultades, como de audaz promotor del cambio dentro del orden.

La presidenta Rousseff, por ahora, parece llevar la ventaja sobre Neves, el afecto mágico del poder la favorecería, puesto que la baja en la economía, la creciente inseguridad y los diversos escándalos en los que se han visto envueltos varios de sus ministros y asesores, no parece que la afectaran. Lo mismo que al obtener más del 40% de la votación requiere de un porcentaje de opinión en aumento que espera sacar de los sectores populares. Mas algunos analistas opinan que en la política como los ríos se tiende a buscar en determinadas ocasiones el antiguo cauce, lo mismo que se revive la polaridad. Son los que pronostican que Neves podría trepar la cuesta y alcanzar y derrotar al oficialismo. La suerte del candidato de la oposición  pende de la capacidad de comunicarse con el pueblo. Los duros ataques contra su humanidad y su vida privada, que en esa nación de hombres libres, por lo menos de entrada le han suscitado nuevas simpatías y han centrado la atención en el político conservador, quien es amigo del diálogo y la búsqueda de acuerdos.